—¿Deberíamos de ir a la policía? Ya han pasado dos semanas que Taehyung no da señales de vida y sinceramente, no creo que se haya mudado.
—No deberíamos de precipitarnos, podría, no sé, estar viviendo en Japón o China, inclusive en América y no necesariamente tendría que habernoslo dicho, tal vez y ni siquiera nos consideraba sus amigas.—Jisoo agachó la cabeza, sintiendo como las lágrimas empezaban a caer por su rostro.
—Hey... No llores.—Seulgi posó su mano en la espalda de Jisoo. —Él no haría eso. Deberíamos simplemente hacer una denuncia, si de verdad se mudó de país, nos enteraremos tarde o temprano.
—Está bien.—Jisoo asintió y sorbió su nariz, levantó la mirada encontrándose con la de Seulgi. Ésta sonrió y secó las pocas lágrimas que habían quedado en el rostro de Jisoo.
—Todo estará bien.
°°°
—Vengo a denunciar un secuestro.
—¿Cómo dice joven?
Hoseok suspiró.—Un amigo mío ha sido secuestrado.
El policía empezó a revisar unos papeles y cuando encontró uno en donde tenía anotado todos los datos de la persona que denunciaría y el motivo del porqué, miró a Hoseok esperando a que volviera a hablar.
—Su nombre es Kim Taehyung y lleva desaparecido desde hace dos semanas.
—No hemos recibido ninguna denuncia sobre una persona desaparecida. ¿Está seguro de que ha sido secuestrado?
Hoseok comenzó a alterarse, ¿cómo no podía creerle? Él no estaba mintiendo.
—¡Si! Estoy seguro, la misma persona que me secuestró a mi, lo ha hecho con él.
—Pero usted ahora mismo se encuentra libre, ¿cómo pasó eso?—el policía empezó a anotar algunas cosas en la hoja, Hoseok no entendía que era lo que estaba escribiendo porque la conversación se estaba desviando del tema central.
—Él me liberó a cambio de que Taehyung se quedara con él.
—Entonces no es un secuestro.
—¡Estoy diciendo que Taehyung fue secuestrado y usted no me cree! —Hoseok golpeó la mesa, estaba comenzando a desesperarse.
—¿Qué has dicho?—Escuchó una voz femenina detrás suya y se giró, encontrándose con la misma chica de la cafetería acompañada de otra que no conocía. —Taehyung... ¿Fue secuestrado?
—¿Ustedes son amigas de Taehyung?—El policía preguntó, mientras seguía anotando más cosas en la hoja.
—Eso... Era lo que ibas a decirme... No puedo creerlo...—Jisoo empezó a sentir como su estómago se revolvía. Seulgi miraba toda la situación estupefacta.
—Escuche joven, dígame todo lo que sabe sobre Kim Taehyung y su secuestrador, empezaremos su búsqueda apenas hable.
Hoseok asintió y comenzó a relatar todo lo que había sucedido desde el momento en el que JungKook lo encerró a él en su casa hace un mes atrás.
°°°
—¿Con quién hablabas?
JungKook colgó la llamada, guardó su celular en su bolsillo trasero del jean y miró a Taehyung con el ceño fruncido.
—No es de tu incumbencia.
Taehyung se encogió de hombros y trató de ocultar la sonrisa que se estaba formando en su rostro. ¿Jungkook acaso era idiota? La policía podría rastrearlo mediante su número de teléfono. Y Taehyung agradecía a dios o quien fuera que estaba allá arriba viéndolos, que JungKook fuera tan descuidado.
Hacían dos semanas o tal vez tres— no llevaba la cuenta de los días en los que JungKook decidió encerrarlo porque estaba 'enamorado' de él—que se encontraba en esa casa, lejos de la ciudad, de las personas y de todo. Y se sentía frustrado porque Jungkook lo trataba demasiado bien incluso al punto de dar miedo, Taehyung no pensó jamás que un secuestro sería así, ¿sería demasiado masoquista si quisiera que JungKook lo encerrara y atara en vez de dejarlo libre como si vivieran juntos como una pareja? Toda la situación era extraña. Taehyung lo supo desde el momento en que lo conoció en la cafetería que su vida cambiaría, pero nunca pensó que lo haría de esa forma.
¿Quién hubiera imaginado que ese chico con sonrisita de conejo que te producía demasiada ternura, sería ese chico enfermo a tal punto de secuestrar al chico que quería?
Y a pesar de toda la libertad que Jungkook le daba a Taehyung, aún así, no era capaz de escapar. No quería admitir que se sentía cómodo estando en ese lugar, alejado de toda responsabilidad y dolor que tenía estando en el mundo "real". Porque si, Taehyung se sentía como si estuviera en un sueño.
JungKook estaba feliz, tal vez algunas cosas se le habían ido de las manos como el hecho de tener secuestrado a Taehyung o que la policía lo estaba buscando, pero aún así estaba feliz. ¿Para que pensar de manera negativa? Él sabía bien que tarde o temprano todo eso pasaría. Pero no se arrepentía de sus actos, tal vez le hubiera gustado estar con Taehyung de una manera diferente, pero tenía que pensar en que ahora se encontraba junto a él, eso era lo único que importaba.
JungKook creía que Taehyung nunca lo dejaría o eso le había dicho él.
Antes de que
llegara Taehyung.JungKook mordió su labio inferior, todavía indeciso con lo que iba a hacer de ahora en adelante. ¿Taehyung se enojaría con él si se enterara sobre lo que estaba pensando?
Marcó el número de Jisung y esperó a que respondiera su llamada, cosa que no sucedió y volvió a llamar, luego de tres intentos, atendió.
—¿Qué mierda haces llamando Jungkook? ¿Eres idiota acaso? Estas siendo buscado por la policía, podrían rastrearte mediante ésta llamada.
—Lo sé.
—Niño loco.—Bufó del otro lado de la línea.—¿Qué quieres?
—Quiero que busques a Hoseok y...
—Espera espera.—Lo detuvo.—Minhyuk y yo no somos sicarios, te aviso de antemano, no mataremos a nadie.
JungKook comenzó a reír.—No, no era eso lo que iba a decir. No soy un asesino.—Se burló.—Quiero que le des un mensaje de mi parte a Hoseok.
—Dime...
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I hate u, JK (KookTae)
Fiksi PenggemarEras todo lo contrario a lo que pensé que serías. En mi cabeza, eras perfecto... Pero la burbuja en la que estabas encerrado, en algún momento iba a explotar. Y me di cuenta de que nunca antes había conocido a nadie con una mente tan retorcida como...