Capitulo 6: Teminamos

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Capitulo 6: Terminamos

- Gracias, por traerme, me la pase muy bien – le dijo Victoria mirándolo a los ojos con una sonrisa, después de comer la llevo a un parque donde comieron helado y platicaron más.

Bruno salió del automóvil para dirigirse a la puerta de Victoria y abrirla.

- Cuando quieras – le dedico una gran sonrisa – yo también me la pase muy bien, ojala te hayas sentido mejor – hace mucho tiempo que no salía con alguien, solo a platicar y divertirse, hace mucho tiempo que no trataba de hacer feliz a alguien, más bien nunca y era un sentimiento completamente nuevo para él.

- Sí, me siento mucho mejor, muchas gracias – Victoria se acerco a Bruno, se paró de puntitas y le dio un rápido beso en la mejilla, y toda sonrojada se apresuro a entrar al edificio sin decir nada más.

Bruno la contemplo hasta que ya no estuvo al alcance de su vista. Sonrió como un tonto y esa sonrisa le duraría todo el día. Sentía la sangre correr por sus venas, era como un tipo de adrenalina diferente.

Se subió y prendió el auto, arranco, yendo rápidamente por las calles de Chicago, era una de sus pasiones: conducir a alta velocidad, pero muy pocas veces podía, no podía dejar que lo detuvieran por ningún motivo, no podía arriesgarse, por eso lo practicaba afueras de la ciudad, en carreras clandestinas organizadas por sus primos. Esa vez no le importo, condujo como quiso hasta llegar a su casa.

Al día siguiente, los chismes rondaban alrededor de ellos, pero a Bruno no le importaba en absoluto y Victoria trataba de no escucharlos e ignorar.

Bruno pensó en recoger en la mañana a Victoria para traerla a la escuela, pero al final decidió que no podía tomarse tantas libertades sin preguntarle.

Todos los alumnos de la escuela, estaban pendientes de ellos, a él no le importaban los chismes en absoluto, pero sabía que a Victoria si y lo menos que quería era que fuera la protagonista de más.

Victoria se dirigió a su casillero, iba a recoger su uniforme ya que tenía entrenamiento con las porristas a la última clase, pero conforme se iba acercando a él diviso a un corpulento jugados de fútbol americano, que estaba recargado esperándola: Román.

Desde la discusión de su rompimiento, no lo había visto, llego a sus oídos que había desaparecido después de eso. Victoria pensó en no ir ala practica y llamarle a Samantha para que se hiciera cargo, pero el ya la había visto, no podía dar la media vuelta e irse.

- Victoria, necesitamos hablar – le dijo dirigiéndose hacia ella.

- ¿Qué quieres Román? Ya te dije que no te me acerques – dijo ella tomando su distancia.

- ¡Por favor necesito explicarte! – le dijo.

- Está bien, dime, explícate – se cruzo de brazos y lo mira desafiante.

- Pero no aquí, los rumores ya empezaron a correr, no quiero que especulen que rompimos – dijo tomándola de la mano y jalándola hacia afuera.

- ¡Pero si lo hicimos! – se sacudió tan fuerte que pudo soltarse de su agarre, Victoria se dio cuenta de que la mayoría de las personas del pasillo los miraban, Román la miraba con cara de suplica y ella sin mirarlo camino hacia la salida, con Román pisándole los talones.

Ya afuera y un poco alejados, la ex pareja discutía sin cesar.

- Victoria ya te eh explicado mil veces que estaba borracho, no sabía lo que hacía – le dijo suplicante.

- ¡Román, intentaste violarme! ¿Tienes la magnitud de lo que es eso?, y no solo fue esa vez, ¡querías obligarme!, yo no voy a estar con una persona que intento abusar de mi – dijo gritando, estaba más enojada que nunca.

- ¡Si, lose y perdón! Te prometo que no va a volver a pasar, te lo juro, Victoria, somos las personas más importantes de toda la escuela, las que están destinadas a estar juntas, no podemos terminar así, como así y aparte nos amamos, ¿Qué va a pasar con todo eso?

- Estas muy equivocado, yo ya no te amo, no te voy a negar que te quise mucho, pero ya no, me... me gusta otra persona – Victoria sabía que si Román pensaba que ella quería a otra persona la dejaría en paz -y yo ya no puedo seguir con esto y tampoco me importa ya lo que diga la gente, ya no puedo estar cerca de ti – le dijo gritándole y con cara de repulsión.

- ¡Por favor Victoria! ¡No digas tonterías!, ¿quien más te podría gustar, si hemos estado toda la vida juntos? No digas estupideces. – La ofendió

- ¡VICTORIA! – Ella al escuchar su nombre a lo lejos, se volteo rápido y vio a Bruno que se dirigía hacia ellos con paso firme - ¿Te está molestando? – Bruno miraba a Román desafiante y tenia los puños cerrados y apretados, preparados para golpear.

- ¿Tú qué haces aquí Rossenbown?, no te metas en lo que no te importa– dijo Román también con los puños cerrados y en posición defensiva.

- Claro que tiene que ver – Victoria caminó hacia Bruno y lo tomo de la mano, Bruno sintió el tacto caliente y suave de Victoria en su mano, era tan pequeña y frágil. – ¡Estamos saliendo ahora! – eso sorprendió a los dos, ¿ella había dicho que eran novios?

- ¡Claro que no, Victoria! – la furia de Román empezó a crecer, él sabía que era mentira.

- ¿A no? – Victoria se puso enfrente de Bruno, se paró de puntitas, tomo el cuello de Bruno y lo jalo hacia ella y sin avisar a sorpresa de los dos, lo beso intensamente. Los dos pusieron los ojos como platos, realmente sorprendidos. Bruno estaba fascinado con la suavidad y sabor de los labios de Victoria, la tomo también de la cintura y la pego a él para intensificar el beso. Victoria se sintió extraña, con raras sensaciones en el estomago, le gustaba, sus labios eran adictivos.

Román exploto de furia, no soporto ver a Victoria con otro que no fuera él.

- ¡Eres una zorra! – grito, Bruno reacciono a las palabras, soltó la mano de una Victoria ofendida y se dirigió hacia Román, plantándole tremendo puñetazo en el rostro, que lo tiro al suelo noqueándolo por completo

- Vámonos – tomó a Victoria de la mano y se la llevo con él

Cuando Román intento pararse, para responder el golpe, ellos ya se habían alejado. Bruno la tomaba de la cintura y la ayudaba a subirse a su carro.

Román estaba fúrico, era la segunda vez que lo golpeaba y eso no se iba a quedar así, era capaz de romper la alianza por Victoria.

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Amor en la MafiaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora