𝑃𝑎𝑝𝑖 𝐽𝑖𝑚𝑖𝑛 #2 [Yoonmin]

🌼Capítulo 1.🌼

Cinco años atrás...

Jimin llegó a casa de su hyung, no quería llegar en ese estado a su casa y preocupar a su madre.

Cuando Seokjin abrió la puerta algo adormilado, Jimin se lanzó a sus brazos mientras lloraba. Su cuerpo dolía, se sentía muy mal, había deja de ser virgen y no sabía que le dolía más, si su trasero o el hecho de que no conocía al chico.

Seokjin miró las lágrimas en su rostro, pronto lo adentró a su hogar para dirigirlo a uno de los sillones que se encontraban en la sala.

—¿Qué pasa? —apartó sus cabellos que cubrían sus ojos para así poder mirarlo correctamente.

—Yo... Seokjin hyung... Hice algo malo... —lloró más fuerte.

Seokjin limpió sus lágrimas, mirando al menor con pena.

—Dime que pasa Minnie, por favor.

Jimin sorbió su nariz, tratando de dejar de temblar, pero era imposible.

—¿Recuerdas la fiesta de graduación? —preguntó con voz cortada. Seokjin asintió—. Estuve bebiendo y... —su llanto se hizo presente, evitando que siguiera hablando.

Seokjin sentía sus nervios y preocupación a flor de piel. Tomó una cobija que se encontraba ahí para colocarla en sus hombros y que así dejara de temblar.

—Seokjin hyung... Ya no soy virgen... Desperté con un chico, él y yo estábamos desnudos en la tina de un baño —soltó, sintiendo sus lágrimas correr por sus mejillas. Seokjin lo abrazó refugiándolo en su pecho.

—Tranquilo, Minnie —susurró bajito, intentando que el menor se calmara. Jimin lloró fuerte, aferrándose al pijama de su hyung—. Tranquilo bebé, todo está bien, tú estarás bien.

—Me duele.

—Vamos bebé, te daré una ducha y luego regresáremos a la cama, es muy temprano para que ambos estemos despiertos.

Jimin seguía llorando mientras Seokjin lo dirigía al baño. El mayor lo dejó sentado encima del lavabo para preparar la tina con agua tibia. Cuando estuvo lista ayudó a Jimin a despojarse de su ropa y a entrar. El menor todavía seguía teniendo los efectos del alcohol en su cuerpo así que se tambaleaba un poco.

Jimin le dio la espalda con lentitud, Seokjin comenzó a pasar la esponja con delicadeza y cuidado en toda la zona. Al terminar de lavar su espalda pasó a su cabello rosa dando leves masajes con sus dedos, notando como Jimin se dejaba hacer. Al final retiró los restos de acondicionador con agua pura y dejó que terminara por lavarse.

Jimin le indicó que había terminado así que se aproximó con una toalla, envolviendo su pequeño y fino cuerpo con la tela. Lo ayudó a vestir y ahora lo dirigió a la cama.

—Tranquilo bebé, ya no llores más —le pidió con voz dulce mientras lo recostaba y él entraba del otro lado—. Vamos a dormir ahora.

Seokjin lo abrazó, dejando un beso su frente que le transmitió fuerza y amor.

—Descansa, Minnie.

Jimin limpió el resto de lágrimas en su rostro para pronto abrazar a su hyung y en cuestión de segundos quedar dormido en su pecho ante lo protegido que se sentía. Seokjin suspiró feliz al escuchar la respiración de Jimin más calmada.

—Yo cuidaré de ti, bebé —susurró, intentando dormir después de asegurarse que el menor no tuviera pesadillas.

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