Once Again...

.048.

Narra Yewon

Tomé la decisión de salir a caminar por un momento, en realidad me siento vulnerable y no quiero que nadie me vea así...

Me senté a un costado y abracé mis rodillas para poder desahogarme.

Este chico me confunde, realmente me lastima.

Es curioso, si me pongo a pensarlo, como de una tontería, surgen temas que no tienen que ver en el asunto.

Pero la manera en que lo dijo...

—¿Cómo es posible qué una persona sea así?

Sólo quiero fundirme en la oscuridad.

Narra Yoongi

—Demonios Yewon, ¿dónde mierda estás? —me encontraba mirando para todos lados.

Esta pequeña inconsciente, se tiro de la venta jah ¿en qué cabeza cabe?

Por décima vez me atendía el contestador— Rayos cuando te enc...

—Mira esa chica..

—¿Qué hace a estas horas?

—Deberíamos...

—¡Hey! —volteó a verme, corrí hasta ella, esos idiotas se fueron rápidamente.

—Yo.. —susurro mirando sus piernas.

—Tú.. sólo porque dije unas cuantas cosas.. ¡No tenias porque huir! —la reprendi agitado.

—Yo, lo siento —en su torpeza se cayó.

—Por el amor de Dios —la tomé del brazo— Vamos, levántate... una chica no debe andar sola a estas horas...

Narra Yewon

Me sentí pequeña por su tono agresivo, me levantó y tironeo para que caminará sujetando mi mano, estaba agitado como si hubiese estado corriendo.

—No le digas a los chicos que vine a buscarte, quien sabe lo que dirán si lo descubren.

Me solté con cierta brusquedad, él volteó a verme, podía ver su enojo, daba miedo.

Tragué saliva y bajé la mirada nuevamente, un silencio se formo entre ambos.

—¿Por qué me menosprecias?

Maldición, no quería que viera el brillo en mis ojos, el no respondió, guardó silencio nuevamente.

—Sin siquiera conocerme —susurre.

—Estas despreciándote tu misma —su tonalidad era fría, tan dura.

Narra Yoongi

Luego de un momento en silencio, escondiendo su rostro de mí, pude oír su voz.

—¿De verdad hay algo malo en mi? —se auto preguntaba en un susurro.

Ni siquiera me conozco yo mismo Yewon.. ¿cómo pudiera..?

—Si, que no te sabes amar. —era consciente de que la pregunta no iba dirigido a mí.

—¡Se muy bien lo que me pasa, no necesito que me lo recuerdes! —por primera vez levantó su tono de voz, poco a poco levantaba su mirada— Eres cruel, ¿lo sabes?

Eso en serio me asombro, sus ojos, su mirada, ella por primera vez era frontal.

Narra Yewon

Su silencio era rotundo, su mirada profunda, nos encontrábamos frente a frente en un reto de miradas; era aterrador, pero no iba a retroceder, no ahora.