.135.

228 35 22
                                    

Narra Yewon

-Pequeña, despierta... -abrí mis ojos para ver a unnie sonriendo.

-Yerinie -sonreí frotando mis ojos.

-Levántate, eres la última -sonrió- parece que estabas cansada.

-De hecho si -bostece.

-Te espero abajo. -asentí y la observé alejarse de mi cama en dirección a la puerta.

-Mhm -giré mi cuerpo para estirar un poco mis músculos- oh ¿qué hago aquí? -observé mi colchón, mis sabanas, mi cama, en fin, mi habitación- Yo estaba...

-Me quedaré callada, no molestaré. -sonrei para con la punta de mi pie dar impulso y hacer girar dicha silla.

Ladee mí cabeza pensativa- ¿me encamine entre dormida?

Narra Sojung

Los chicos se encontraban corriendo por toda la casa, al parecer se quedaron dormidos, admito que era divertido verlos caerse y chocarse entre si, gracias al apuro.

Soy cruel lo sé.

-Deja de reírte -el pelimorado suspiró agotado.

-Te ves bien -sonreí.

-Que graciosa. -me acerqué para acomodar el dobladillo de su camisa- Gracias -se sentó en la mesa.

-Te veo decaído, más de lo normal.

-Oye... -ambos reímos- Sólo pienso, han estado pasando muchas cosas en tan poco tiempo.

-Lo sé -suspire asintiendo- pero por lo que veo tienes otros dolores de cabeza.

Sonrió algo deprimido- Mhm algo así...

-Sólo enfrenta la situación.

-Que fácil, la veo muy feliz con Moon Bin.

-Es su amigo. -rode los ojos.

-Parece otra cosa... -susurró para si mismo.

-Mhm, -asenti- creo que quiere verlo con otros ojos -pensé en voz alta.

-Lo sé -sonrió con tristeza.

-Me pregunto ¿por qué sera?

-¿Mhm? -me miró dudoso.

Antes de poder seguir, escuchamos un ruido, como algo rompiendose y al mirarnos corrimos hasta el living- ¿Qué pasó? -pregunté al verlos.

-Perdón jejeje -se disculpo Yerin.

-Te dije que debias de tener cuidado... -pero interrumpió a Tae.

-Pudiste haberme detenido.

-¿Pude? -repitió- ¿en serio?

-¡Si! -reclamo.

-Paren chicos, ¿se lastimaron? -ambos negaron-Bien -Nam suspiro aliviado- ahora si ¿¡cómo se les ocurre jugar así!? -aquelloso dos empezaron a correr entre risas cómplices- ¿Por qué corren? no soy tan terrorífico...

-Mhm.. tal vez si... -volteó a verme, le señale aquel objeto que yacia roto en el suelo.

-Hay no... ¡venga acá mocosos! -empezó a correr en busca de lls culpables.

Reí para ver aquella figura de cristal- Debo recogerla. -me incliné dispuesta a tomar los pedazos con cuidado- Ahg... -pero no sirvió de mucho, me corté levemente.

-¡Oye ten cuidado! -corrió hasta mi.

-Estoy bi...

-Oh por dios, sangre -palideció.

Once Again... Donde viven las historias. Descúbrelo ahora