A sweet cake (edición No.1)

Cap 52: Un viejo amigo.

- adivinó.- dije dirigiéndome a shiro.- ahora vas a monologar.
-primero tienes que cambiar el  campo dramáticamente para poder atacar.- empezó sin tomar en cuenta mi comentario.
- aunque me ignores no significa que no pueda interferir.
- no puedes interferir.- me reto.- primero que nada no creo que quieras arriesgarte a recibir un golpe tan fuerte y segundo estarías interfiriendo con el asesinato de uno de tus compañeros.
- ja ¿y tú crees que eso me importa?.- le contraataque.- yo no soy el pulpo, el gobierno no tiene ningún poder sobre mi.
- Estás segura de ello B-01 o prefieres K-(80C)
-¿como sabes...
- ¿Que es B-01?.- pregunto Terasaka
- no es nada.- dije mientras le dedicaba una mirada amenazante al de blanco.
- B-01 es un...- una luz nos cegó interrumpiendo al mayor.
El cuerpo semiconsciente de itona cayó en los tentáculos del sensei.
- ahi lo tiene shiro-San, pero quiero infórmale que esa clase de trucos no volverán a funcionar conmigo, así que deja al chico con el grupo y aléjate silenciosamente; oh y te agradecería si divulgaras correctamente la información de que yo no soy el ladrón de lencería.
- y que mi pecho es en realidad B ¡B!.- grito exaltada la peli verde.
Pero a pesar de las peticiones y la reciente derrota shiro no se veía perturbado, ¿por que no se ve perturbado?
-¿que escon...
-¡DUELE! ¡MI CABEZA DUELE!.- el grito del albino interrumpió mi pregunta por lo que rápidamente me aproxime a el .- ¡ MI CUERPO SE VA A DESGARRAR!
-¿que le sucede?.- pregunte demandante.
- oh bueno, supongo que los tentáculos han comenzado a corromper su mente por el shock de sus derrotas; supongo que este es el límite del muchacho.- mencionó más para el que para nosotros.- ¡itona! Mantener tus tentáculos en buen estado es demasiado costoso, y dado que no eres capaz de llevar a cabo un plan tan elaborado... este es el adiós, ahora estás por tu cuenta.
Maldito imbecil, fue lo primero que se me vino a la mente, sin embargo se bien que no puedo hacer nada contra shiro al menos no ahora.
- itona-kun.- le llame mientras trataba de acercarme a él sin recibir un golpe.- itona-kun tú puedes controlarlo.- sin embargo El Fuerte grito que soltó me obligó a retroceder en mi lugar.
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-¿que te tiene de tan mal humor?.- pregunto kiba mientras entraba a mi habitación.
- no pude ayudarlo, estuve junto a él y no pude hacer nada.
-¿no pudiste ayudar a quien?
- a itona
- ¿el chico pulpo con problemas de ira?.- pregunto extrañado mi hermano. ¿En qué momento entro?
-¿tú que tienes que ver con el? ¿Desde cuando erres tan buena compañera?.- soltó el albino, lo ultimo con ironía cabe aclarar.
- Por que yo conozco el dolor de sufrir modificaciones y no se... ¿empatía?.- trate de excusarme.
-¿nos estás mintiendo?.- dijeron al unísono.
- loses estoy diciendo de forma educada que no se metan en donde no los llaman.- les conteste mientras me encaminaba al baño de mi recámara.- pero como no entienden chinguen a su madre.
-¡oh claro! Y como digna cobarde te ocultas en el baño.- me grito mi consanguíneo.
-¡cállate!
• a la mañana siguiente •
- debería de ver el lado bueno sensei.- dije mientras tomaba uno de los tantos cupcakes que le regalaron ese día.- tiene demasiados dulces de arrepentimiento.
- en primer lugar no debería de tener estos dulces ¡nunca tuvieron que dudar de mi!.- grito, a lo que yo rodé los ojos.- pero no se preocupen por este desagradable espécimen...
- aun que no dejó de estar inquieta por Horible-kun.- mencione contándole el royo al chantaje que estaba apunto de iniciar.- ¿quien sabe que tipo de decisiones tomará ahora?