Capítulo 1

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Era una tarde fría y nublada de diciembre. Ella tenía que ir a la escuela. ¿Cómo era posible que siendo diciembre tuviera que ir a la escuela? No era justo que sus compañeros no tuvieran que ir pero ella aún debía algunas materias antes de empezar las ansiadas vacaciones.

Ese día iba a ser importante.

El día anterior le había hablado. A él. Después de mucho tiempo. Le había preguntado cómo estaba y si tenía que ir al día siguiente porque si no eso cambiaría sus planes. Si le decía que no, entonces se lo diría en ese momento. Pero por suerte le dijo que sí, que aún tenía que ir.

Respiro aliviada.

Jenny le contestó que menos mal porque tenía que decirle algo. Él se veía un poco sorprendido, tal vez intrigado.

Los demás del pasillo los miraban sospechosos ya que pocas veces hablaban. Si supieran que antes eran mejores amigos.

Alex se fue y ella quedó muy nerviosa. Su corazón estaba acelerado y recién intentaba calmarse. Iba a ser peor al día siguiente pensó.

Ese día iba a ser importante.

¿Qué importaba que tuviera que ir a la escuela? ¿Qué importaba que fuera diciembre? ¿Qué importaba que los demás ya empezaran las vacaciones invernales mientras ella seguía con los finales? Nada, nada importaba, sólo él.

***

Alex estaba con sus compañeros, momentos antes lo había perdido de vista y estaba a punto de irse como una cobarde pero respiró profundamente, tomó coraje y le habló.

- ¿Puedes venir un momento?

- Sí -contestó y se alejó de sus amigos-. ¿Qué pasa?

- Tengo algo que decirte, pero aquí no.

Lo llevo a otro lado, al lugar más alejado en el instituto. Era un jardín pequeño, con enredaderas en las paredes con flores naranjas, árboles, canteros con flores y unos bancos. A medida que iban acercándose ella comenzó a hablar preguntándole sobre su familia.

- ¿Cómo están tus hermanos? -dijo casi sin aliento.

- Bien, estudiando.

- ¿Qué están estudiando? -quiso saber.

- Administración de empresas, pronto rendirán un examen. -Y no dijo nada más. Tenían razón sobre él, había que sacarle las palabras con destornillador. Eso le dió gracia, le recordaba a como eran antes.

Así que Jenn siguió y preguntó cuáles eran sus planes a futuro, si estudiaría o qué. Él le dijo que sí y le preguntó lo mismo. Ella respondió que ya había decidido.

Justo se dió cuenta que ya habían llegado al jardín. Era precioso a pesar de estar con pocas flores.

Alex se giró y preguntó:

- ¿Qué querías decirme?

Jenn estaba nerviosa, respiro hondo, trato de calmar su acelerado corazón aunque era imposible, y le dijo:

- Me gustas.

Tarde de DiciembreDonde viven las historias. Descúbrelo ahora