Capítulo 2

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- Me gustas.

Su corazón latía desesperadamente, tal vez era posible que él también lo escuchara. Sus manos estaban frías y transpiradas y sentía una opresión en el estómago. ¿Era posible que fuera a morir o a desmayarse?. Fueron unos segundos de insoportable silencio hasta que él dijo:

- Ya lo sabía. -Aunque se veía algo sorprendido por la confesión, a lo que ella le contestó:

- Pero no es lo mismo a que yo te lo confiese.

- ¿Por qué no me lo habías dicho antes?

Eso la sorprendió pero ya tenía una respuesta preparada.

- ¿De qué habría servido si te lo decía antes?

- Cierto -concedió. Al menos estaban de acuerdo en algo.

Ella estaba tan nerviosa que no se dio cuenta que estaba apretándose los brazos con las manos así que volvió a bajarlas. Se sentaron. Alex se veía incómodo así que antes de que se levantara y se fuera ella comenzó a hablar.

- Hace frío ¿no?. -Que tonto comentario, era obvio que hacía frío, estaban en diciembre.

- Sí, porque estamos en diciembre, al menos no está lloviendo.

Jenn no sabía que más decir pero sorprendentemente él habló.

- Son bonitas esas flores -dijo señalando las flores de la enredadera. Había olvidado que Alex le regalaba ese tipo de flores para su cumpleaños. Se preguntó si él estaría pensando lo mismo.

- Sí, es verdad, le dan un poco de color al cielo gris. ¿Mañana irás a la fiesta que organizaron las chicas? -preguntó.

- No lo sé. -Y no dijo nada más otra vez, eso la desesperaba.

- Yo tampoco sé si ir, aún no pedí permiso, además no creo que me lo den porque aún no termine con los finales.

- Pero ¿por qué? No sería justo, también tienes derecho a divertirte.

Eso le gustó, él se preocupaba por la injusticia en su vida pero no conocía a sus padres, al menos no como estaban ahora, siempre preocupados por sus notas más que por su vida personal.

- Sí es verdad, pero tienen motivo para no dejarme, tengo que aprobar esta semana o saldré con muy malas notas cuando las entreguen.

- Bueno, no es para tanto -Alex sonrió-, al menos sólo es una materia, yo tengo 2.

- Eso es un poco peor -se rió Jenn-. A mí mañana me entregan las notas.

- Seguro te fue bien y van a dejarte ir a la fiesta.

- Gracias -le dijo y le sonrió.

Eso era algo que le encantaba de Alex, siempre estaba tratando de animarla y hacerla sentir bien.

Siguieron hablando sobre la fiesta a la que él fue el fin de semana anterior. Lleno de luces, bebida y música. Ella tampoco había ido a esa.

- Sí, mis compañeros sacaban muchas fotos -se rió Alex.

- Seguro aparecían "infraganti" (con las manos en la masa) -le dijo alegre.

- Sí, es verdad -se rió él.

Ya se hacía tarde, el cielo se había despejado y parecía que iba a atardecer. Habían pasado una tarde riéndose, contándose anécdotas y chistes tal como en el pasado. Jenn estaba feliz pero no quería que aquello se quedara así.

Alex se levantó del banco, ella lo imitó con una sola idea en su mente.

- Se esta haciendo tarde, mejor me voy.

- Espera -le dijo Jenn. Se acercó lentamente, colocó sus manos en sus fuertes hombros, se acercó y a un paso de sus labios se arrepintió y se desvió hacia su mejilla, muy cerca de su boca.

Él quedo petrificado, aún estaban muy cerca e iba a irse, así que le preguntó tímidamente:

- ¿Podrías... darme... un... beso? -le dijo la última palabra con un hilo de voz y toda avergonzada.

*****

Qué dirá Alex? se animará? Cumplirá el sueño de Jenn? o le romperá su corazón con una negativa?

Ustedes qué creen??

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Depende de ustedes el descenlace porque no me decido y tengo escrito uno pero puede cambiar.
Así que puedo ser buena o cruel, ustedes deciden. Besos.😘

Tarde de DiciembreDonde viven las historias. Descúbrelo ahora