Eternidad...

3 A.M.

La habitación esta silenciosa.

Lo cual es muy sospechoso.

-Miles, ven aquí-

Pero su amado no responde

Son las 3 de la mañana, y Miles debería estar durmiendo.

Pero las huellas de lodo hacia el sótano, dictan que es otro su comportamiento.

Con cansancio baja las escaleras, sabiendo ya lo que encontrara.

Miles había vuelvo a traer otro animal a la casa.

Su amado ahora dormía entre una de las pilas de animales que coleccionaba.

Todos desmembrados y llenos de mordidas.

Pero eso no parecía afectar a Miles, quien dormía tranquilamente sobre los cuerpos.

Con cuidado lo retiro de su sangrienta cama, para llevarlo al lecho que ambos compartían.

Ya no tenía caso reñirle por ello.

Tarde o temprano dejaría de hacerlo.

Y él no soportaba los ojitos que Miles ponía cuando le regañaba.

Así que solo le cargo y lo arropo.

Ya mañana alimentaria mejor a su amado.

Seguramente el proceso le generaba más hambre, y por ello Miles buscaba lo que él no le estaba dando.

*

*

*

Visitar a Trager siempre fue fascinante.

Le había conocido en la universidad, y desde entonces sus experimentos no dejaban de sorprenderlo.

Lamentablemente el pobre hombre solo deseaba una cosa.

Amor...

Un desperdicio para su ingenio.

Pero si le mantenía feliz y trabajando, él era capaz de pagar por encontrar a alguien que pudiera amarlo.

Cosa que en un principio fue fácil.

Hasta que el idiota se "enamoro" de su secretaria.

Cuando la infeliz juro estar embarazada y querer abortar, ese fue el declive en la mente de su amigo.

Trager la apuñalo con gran maestría, usando solo unas tijeras.

Fue glorioso ver las fotos.

Pero su amigo ahora tendría que estar encerrado.

Lejos de su lugar de trabajo.

Al menos hasta que el intervino.

Haciéndolo pasar por un paciente psicriatico, Trager podía seguir trabajando.

Y el idiota de Park nunca se dio cuenta.

Pero Upshur sí.

Ese bastardo sospecho de todo desde el primer día.

Por ello no podía dejarlo ir.

Tenía que obligarlo a callar.

Es por ello que le mandaron matar.

Un par de disparos y el bastardo cayó al suelo como mosca.

Lamentablemente eso termino con Trager.

Su mejor amigo se obsesiono con traer de vuelta a Upshur.

Algo posible según sus investigaciones.

Con facilidad le hizo pasar por muerto.

Pago grandes sumas de dinero para acondicionar esa gran cabaña en el bosque.

Y pago aún más por traer todo lo que su amigo deseaba.

Lo cual ahora rendía sus frutos.

Aquel cuerpo en descomposición, que hablaba, caminaba y obedecía.

Era lo que tanto había esperado.

Richard lo llamaba Miles.

Pero Jeremy no era idiota.

Ese no era Upshur...

Aunque era algo que su amigo jamás debía saber...