La tristeza se había ido hace tiempo, o eso era lo que yo creía, porque ahora mismo ésta me carcome el interior.
El mar está furioso, y la marea se me hace cada vez más difícil de llevar.
Hoy me pesa el corazón, me pesa demasiado.
Le amaba, le amo, y no puedo entender como eso no puede serle suficiente. ¿Qué más esperas de mi, cielo?
Sos fugaz mi amor, sos mi estrella fugaz, y no te imaginas la tormenta que haces en mí.