Capitulo 4

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Pasó una semana donde Takuya lo visitaba todos los días sin excepción frustrando cada plan del anaranjado, pero le servía para enterarse de más cosas, como que Suga ya estaba cayendo por culpa de ese japonés y que no tardaría en venderle esas acciones, pues el pelinegro no acudía a ninguna junta, se dio cuenta de esto por Jin quien iba y lo regañaba pero Suga estaba siendo endulzado por ese japonés y Jimin se estaba volviendo loco

Una mañana iba con una playera ajustada sin mangas y un pantalón de piel, estaba listo para venderse con tal de que soltara algo, sería el más coqueto y más sexy de todos, un día anterior había escuchado a Takuya que no lo visitaría así que era ahora o nunca

Tocó varias veces pero nadie le abrió, alzó una ceja y de pronto escuchó una voz

—Lo siento hoy estoy ocupado, puedes irte te pagaré igual

—Ah... —Eso lo sorprendió —¿En serio? — No se escuchó nada — Está bien gracias... Mañana vengo...

—Sí, gracias...

Caminó unos cuantos y gruñó

—Ay ahora que estaba tan bien vestido —Giró su rostro molesto —Esto no se queda así, hoy cumpliré mi cometido así tenga que violarte maldito, tengo que aprovechar que el otro tiburón no está

Fue hasta la puerta del jardín y la abrió gracias a que ya había sacado una copia a escondidas de Suga, robándole un día la llave en el pasado

Caminó por el jardín con las manos en los bolsillos hasta llegar a la puerta de la cocina, se asomó por la ventana viendo que no se veía nadie y giró la perilla asombrándose de ver que estaba abierta

Sonrió ladinamente y entró "Ahora si Yoongi, prepárate para conocerme por completo"

Caminó sigilosamente, contemplando todo el lugar "Que idiota hubiera hecho esto desde un principio" "Definitivamente estoy perdiendo el toque pero no más"

Subió las escaleras investigando, cuando vio una puerta cerrada "Así que aquí estas" Se hizo para atrás y se arregló el cabello, el pantalón se lo acomodó acentuando su entrepierna y cogió el pomo de la puerta

—1... 2... 3

Abrió la puerta con una mirada decisiva, lo seduciría de una u otra manera, tenía muchas ideas en la cabeza, cuando todas se fueron a la basura

Abrió sus ojos como platos

—Yoongi...

El nombrado retrocedió y tiró al suelo un cuadro que envolvía en sus brazos, tenía sus mejillas rojas y sus ojos estaban hinchados llenos de lágrimas, Jimin rápidamente dedujo que llevaba ya minutos llorando

El cuadro cayó haciendo bastante ruido y rompiéndose el vidrio en varios pedazos

—Yo... —Temeroso se agachó tratando de recoger los pedazos soltando un grito y retrocediendo al ver pincharse con los vidrios

—¡Yoongi!

Corrió hasta él evitando los vidrios y se agachó para quedar a su nivel abrazándolo de manera protectora

—¡Pero que pasa! —Con su mano lo cogió del rostro para que se vieran, viendo como Suga lloraba de nuevo

—Yo... —Abrazó a Jimin fuertemente —¡Extraño mucho a mi papa! —Dijo con mucho sentimiento —No puedo —Escondió su cara en el pecho del anaranjado

Por un segundo al verlo tan frágil los ojos de Jimin se cristalizaron sin su consentimiento y lo sujetó más fuerte, con unas enormes ganas de protegerlo

Kings of SuburbiaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora