Capitulo 8

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No esperaron más de 2 segundos y entraron al auto en calidad de urgencia, Jimin manejó sin pestañear ideando un excelente plan donde Suga no se resistiría a sus encantos

Suga por su parte miraba la ventana reviviendo el beso de hace unos minutos, viendo las calles, asombrándose de la colonia bastante buena

Llegaron a unos lujosos departamentos, Suga abrió sus ojos y vio el cielo admirando el edifico, Jimin le tomó la mano y entrelazándola llegaron hasta el elevador

—¿Tengo algo de cerveza está bien?

—Si... —Suga seguía sin pensar, sus manos seguían entrelazadas y eso era lo más importante para él

Llegaron al 7mo piso y lo llevó hasta su puerta, la abrió y entraron, Suga se impresionó del fabuloso departamento, sillones, alfombra, una cocina contemporánea, incluso una mesa de billar adornaba la sala, cuadros abstractos complementaban la fachada negra con blanco de todo el departamento

—Toma —Jimin abrió el refrigerador y le entregó una cerveza

—Gracias —Bebió sin dejar de examinar el lugar hasta terminar con el balcón que se llegaba a asomar gracias a la cortina

—¿Quieres ver la vista?

—¿Eh?

Jimin lo invitó y abrió la puerta de vidrio y salieron, Suga dejó que el aire fresco lo saludara y sonrió al ver la excelente vista de la ciudad

Se acabaron la cerveza y el peli negro lo miró de reojo, tenía muchas dudas de la vida del anaranjado

—Anda, pregunta, sé que tienes la duda puedo verla en tu cara

—La tengo pero no tampoco soy entrometido —Mintió, la verdad era que la duda lo carcomía, incluso se preguntó si Jin tenía razón

—Trabajo en un bar —Dijo tranquilamente abriendo otra cerveza —En un prestigioso bar... Es por eso de las ganancias... Recibo propinas y digamos que soy un encanto —Le guiñó un ojo y tomó del pico de la botella —Pero nunca esta demás buscar algo extra cierto

—Ahhh... —Entonces se sintió más aliviado, ese carácter tan coqueto se debía a que ganaba más dinero así

Suga se tomó otra cerveza escuchando algo de la vida de Jimin, el chico no mintió acerca de sus padres, no le interesaba ocultarlo ni le causaba sentimiento, además extrañamente se sentía bien platicando con él, tal vez era su carácter tan calmado, tal vez era que necesitaba cualquier método para conquistarlo, tal vez....

—Bueno.... Creo que esa fue la última cerveza —Dijo Jimin entrando y quitándose la camisa, quedándose con la interior —¿Te molesta? —Se apuntó y Suga negó —Tú también si quieres, puedes quitarte el saco

Así lo hizo y observó como Jimin sacaba una botella de vino junto con dos copas, sirvió y se sentaron en el cómodo y amplio sillón

El anaranjado estaba recargado coquetamente viendo a Suga y este algo nervioso bebía de la copa para dejarla en mesa

—¿Y? —Preguntó Jimin dejándola y acercándose un poco mas

—¿Y qué? —Alzó una ceja escuchando su corazón palpitar

—Pues... — Rozó el muslo de Suga con su mano —¿Estas más a gusto? ¿Aun batallas para acoplarte con los directivos?

—Pues ya no tanto —Su piel se erizó ante ese contacto

—Oh, tienes una pestaña —Fue hasta él quedando a solo unos centímetros y casi trepándose a sus piernas, le enseñó con sus dedos la pestaña que había cogido —¿Ves?

Kings of SuburbiaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora