Fuimos a las escaleras que había al otro lado del internado. Estaba entusiasmado, pero a la vez un poco preocupado por la venganza de Jon. No sabía que haría.
Estuve pensando en eso hasta que llegamos a las escaleras, que después bajamos hasta el sótano. Había una puerta de madera gigantesca con un pomo de acero. Fer sacó una llave metálilca de sus pantalones, la metió en el pomo y abrió el portón.
Entramos y había un pasadillo de piedras. Caminamos un rato hasta que llegamos a una habitación circular iluminada por unas antorchas.La habitación era gigantesca, en las paredes había escrito 10 textos en otros idiomas que no reconocí en ese mismo momento. En el fondo de la gran habitación había un gran porticón con una talla de león de mármol. Por el alrededor había unos pequeños orificios. Conté 9.
-Bueno, ¿qué te parece?- dijo Fer.
-¿Qué es esto y como lo encontrasteis?
-És una puerta que según dice la leyenda del internado, detrás hay el mayor tesoro que se pueda imaginar, pero hay 10 llaves. Cada una de las llaves está protegida por un guardián- explicó Alba, hizo una pausa y después continuó- La talla de mármol que ves, hay es donde se tiene que poner la 10 llave. Los textos son pistas para encontrar las llaves y a su guardián.
-Todo esto la encontramos por casualidad- dijo Andrés- Nos encontramos la llave en lo más profundo del bosque.
-Y queremos averiguar que dicen estos textos- comentó Jorge.
-Y ahí entras tú- dijo Sergio.
-¿Yo, por què?
-Porque nos dieron la tabarra que aquí vendría un chico nuevo que era muy listo y cosas de ese tipo- dijo Fer.
-No se si podré averiguar que dice. No soy tan listo...-dije agachando la cabeza.
Fer iba a decir algo, pero en ese momento, sonó el teléfono de Alba. Alba lo cogió y nos dijo desesperada:
-¡CORRER, QUÈ NOS VAN A SER UNA INSPECCIÓN!
Me extrañó, pero les seguí.
Pasamos el pasadillo de piedra. Fer cerró el portón y subimos las escaleras. Corrimos hasta llegar a las habitaciones. Y pregunté porque era tan importante.
-¿Por qué hemos corrido tanto?
-Si no estamos aquí cuando hacen las inspecciones, nos vigilarían todo el rato y nadie puede enterarse de ''eso''.- dijo Fer intentando recuperar el aliento por la carrera.
-Pero a pasado algo- dijo Andrés- Siempre vienen a una hora determinada, excepto si ha ocurrido un accidente.
Sergio me empujó a la pared y me gritó.
-TODO ES CULPA TUYA. ESTO PASA POR PEGAR A JON. YA NO NOS QUITAREMOS A LOS PROFESORES.
Me reboté.
-Y QUE MÁS DA. ESO SOLO ES UNA LEYENDA. DETRÁS DE ESA PUERTA NO HAY NADA. ERES UN ILUSO POR CREER QUE ESO TE CAMBIARÁ LA VIDA- le grité desde mi mas profundo resentimiento.
Sergio me volvió a empujar y entró en mi habitación.
-¿Tengo que compartir mi cuarto con ese imbécil?
-Tendrás que compartir cuarto con nosotros- dijo Fer alegre- Al parecer eres nuestro compañero de habitación.
-Me tengo que ir a la zona de las chicas que si no sospecharán si estoy aquí.
Se fué corriendo.
Entramos a la habitación y esperamos que vinieran. Mientras esperamos, Andrés y Sergio estuvieron hablando, Fer y Jorge leyendo en el ordenador ''' Un sueño hecho realidad (gemeliers)''' y yo leyendo un libro sobre cultura clásica griega. La mitología griega me encanta.
Al cabo de un rato, Dustin y Faustina abrieron la puerta. Todos nos pusimos de pie. Faustian se quedó en la puerta y Dustin caminó al centro de la habitación.
-Hemos echo esta inspección sorpresa porque hemos encontrado una cosa muy interesante en un pasillo- dijo Dustin con tono amenazante.
Me latía el corazón a mil por hora. Después me miró a mí.
-Eduardo puedes estar tranquilo, esto sucedió hace unos días.
El peso se me quitó de encima.
-Hemos dejado unos cuantos días para que el culpable saliera y que el cástigo sea más leve, pero como no aparece, tendremos que preguntaros directamente- cogió algo del bolsillo del chaleco y sacó una pistola- ¿Alguien sabe cómo ha aparecido esto aquí?
Todos se quedaron mudos.
-Bueno, como nadie sabe nada, mañana vendréis a las nueve de la mañana a la sala de cástigos.
-Eso no es justo- dijo Fer.
-YO DIJO LO QUE ES JUSTO O NO EN MI INTERNADO- dijo cada vez acercándose a Fer hasta llegar un par de milímetros de la cara- A TI TE TOCARÁ TURNO DOBLE.
Después de todo eso, se fué de la habitación. Todo el mundo se calló.
-Que tontería ponerse así por un par de horas de castigo- pensé.
Yo seguí a lo mio hasta que pasé una página de mi libro y me di cuenta que las letras coincidían con uno de esos textos.
-Chicos, buenas noticias. He averiguado en que idioma está unos de los textos.
Ni se inmutaron.
-Bueno, como nadie dice nada iré a la biblioteca haber si consigo algo de información de griego antiguo.
Salí de la habitación y me fuí a las escaleras para bajar a la biblioteca. Pero cuando llegué decidí ir arriba a ver a Alba.
Cuando la vi no podía creer lo que le había pasado.
