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—¡¿Tae?! —llamó Jungkook al ver una pequeña silueta en la ventada del segundo piso de aquella extraña cabaña.

Por su parte Taehyung sonrió con diversión mientras saludaba a su mejor amigo desde lejos.

—¡¿Qué haces ahí?! ¡Tengo hambre, vamos a come... —no terminó sus palabras ya que una extraña silueta se posicionó detrás de su mejor amigo, colocó una de sus grandes manos en el hombro de Taehyung para luego hacerle una señal a Jungkook que entrara a la cabaña.

—Qué rayos... —Jungkook frunció su ceño al no distinguir bien la silueta de aquella extraña mujer.

Sin pensarlo se dirigió a la entrada de la cabaña pero dudo unos segundos en si debería abrirla o no.

Tragó en secó aquel lugar no daba buena pinta, en realidad comenzaba a asustarle un poco.

—Toc, toc, toc.

Jungkook miró con curiosidad la puerta de entrada al escuchar la voz fémina.

El pequeño estaba a punto de tocar la manilla de la puerta pero una voz detuvo sus actos.

—¡Kookie! —la voz agitada de Yoongi se escuchó a lo lejos—. ¡Ni se te ocurra tocar esa puerta!

—¿Yoon? —Su hermano menor frunció su ceño con confusión, no entendía absolutamente nada de lo que estaba sucediendo.

—Que te alejes de la puerta dije.

Yoongi hablaba estrictamente ya estando frente a su hermano menor.

—P-pero Tae está ahí adentro.

Yoongi al oír las palabras del menor tragó en seco, su tonto amigo había caído en la trampa.

—Quiero que te mantengas alejado de la cabaña, no quiero que entres, no quiero que la toques y mucho menos que des golpes en la puerta. —la voz del mayor sonaba ruda pero un tanto exigente—. No quiero que entres a este lugar, ¿Entendido?

Jungkook asintió con inocencia.

—Ahora quiero que te alejes de aquí y esperes a los padres de Taehyung en un lugar concreto, y tampoco quiero que te muevas de ese lugar, no hables con nadie a excepción de sus padres.

—¿Q-qué está pasando?

—¡Que te alejes dije! —su voz salió completamente alterada—. Yo iré por Taehyung.

—Toc, toc, toc. —La voz de aquella extraña mujer volvió a sonar.

—Largo, y no me esperes. —Yoongi le susurró a su hermano menor, este confundido asintió y se alejó del lugar cómo su hermano le había indicado.

Pero Jungkook no era tonto del todo, sabía que algo no andaba bien, así que decidió alejarse a los arboles más cercanos y esconderse tras uno de ellos.

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Dulcinea 🍬 «BTS»Donde viven las historias. Descúbrelo ahora