Nueve

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Respire profundo y presione el timbre. Estuve media hora dando vueltas, pensando si bajarme del auto y si era correcto venir a verla.

No era correcto que yo estuviera ahí, pero necesitaba verla. Tarde una semana en encontrarla, y ahora que estaba frente a su puerta no podía evitarlo.

Estaba obsesionado, y aunque había intentando olvidarme de ella, después de verla nada fue igual. Un día me pase horas afuera del trabajo de su madre con la esperanza de volver a verla pero no tuve suerte. Fui a la casa de sus padres y pude averiguar que no se estaba quedando con ellos y hasta su viejo departamento seguía vacío. La noche anterior regresaba a casa de la empresa y decidí desviarme hasta su trabajo. No creía tener suerte, y lo hice con la idea de que debía convencerme de que nuestro destino era estar separados, y fue gracias al mismo destino que la vi. Ella subía a su automóvil, se veía tan hermosa como siempre; no me atreví a detenerla y pedirle que habláramos pero no dude en seguirla. Tal vez así, llegaría hasta su casa.

Anoche no pude dormir, la ansiedad y la necesidad de verla no me dejaron. Espere a que fuera una hora prudente y aquí estaba. Ansioso, nervioso y con el corazón completamente acelerado, deseoso por verla.

La puerta por fin se abrió, acabando con mi ansiedad y esos interminables minutos que pasaron. Se veía preciosa como siempre. Cada expresión de su rostro reflejaba asombro, definitivamente yo era la última persona que esperaba ver.

-Justin- hasta su voz expresaba el asombro -hola- ni siquiera atinó a sonreír, sólo se cubrió con la fina bata de seda que usaba sobre su camisón -¿qué haces aquí?- miró despavorida hacia la calle, como si se estuviera asegurando que nadie me viera en su puerta.

-quería verte, Hailey necesitaba verte- mis palabras mostraban la necesidad que sentía -¿puedo pasar? Necesito hablar contigo-

Suspiró. Me conocía muy bien, sabía que era perseverante y que no me iría de ahí hasta que habláramos -sólo un momento- advirtió antes de permitirme entrar.

Ella caminó delante de mí, guiándome hasta la cocina. Su casa era muy bonita, espaciosa, ordenada y en cada rincón podía verla. Se notaba que ella se había encargado de cada detalle de la decoración, hasta su perfume estaba impregnado en cada rincón.

-¿cómo supiste donde vivo?- me reclamó con molestia.

-te confieso que no fue fácil, tardé una semana en saberlo- me senté sobre una de las sillas del taburete de la cocina -y créeme que ya me había rendido pero por suerte apareciste y te seguí hasta aquí-

Volvió a suspirar -estas loco, lo sabes ¿cierto?-

Yo reí -tal vez, o será que tu me tienes loco-

-bien Justin, dime que quieres y a que viniste- se cruzó de brazos y me miró con seriedad.

-sabes que siempre me ha gustado que seas directa- dije -necesitaba verte, quería verte. Desde que nos vimos, no he dejado de pensar en ti… yo aún siento cosas por ti y aunque he hecho lo posible por olvidarte simplemente no puedo-

-Justin yo...-

La interrumpi -aún te amo Hailey- solté de una vez, dejándola sorprendida -y si tu aun sientes algo por mí, si aún queda un poco de cariño por mi yo soy capaz de...-

-no lo digas Justin- dijo con prudencia -no te atrevas a decirlo, porque yo no quiero escucharlo- se paró de su silla, tomando distancia de mi -mira Justin- mordió su labio inferior -yo te amé mucho y siempre sentiré un cariño especial por ti, pero nuestra relación ya forma parte del pasado, de mi pasado. Los dos sufrimos mucho cuando terminamos, se que a ti te dolió mucho más que a mi pero fue lo mejor, necesitaba irme. Dejarte atrás- no podía negar que sus palabras habían removido aquel pasado que yo creía superado -peleabamos mucho, y me arrepiento de haberte engañado y mucho más de cómo lo supiste-

-pero eso es historia, además yo te perdone. Fue un error, somos humanos, cometemos errores y fue un momento de debilidad. Yo te prometí que iría contigo y no lo hice-

-A ver Justin, no me justifiques- suplico -yo no quiero que lo hagas, no fue un momento de debilidad. Si estaba molesta contigo, es cierto, pero con él ya pasaban cosas desde mucho antes y yo estaba completamente consiente de lo que hice. Si me arrepiento de haberte mentido porque debí haber terminado contigo antes de que eso sucediera pero así pasaron las cosas-

-eso ya no importa. Yo te amo y lo único que importa es que volviste, que estas aquí y no quiero dejarte ir otra vez-

-Justin, te lo dije, nuestras realidades son diferentes…-

-eso lo sé, pero yo puedo hablar con Selena y-

-déjame hablar- me volvió a interrumpir -Justin yo me casé. Shawn y yo nos fuimos juntos, y hace unos años me pidió matrimonio-

En ese momento pude escuchar a mi corazón romperse. Yo había vivido años pensando en ella, viviendo de su recuerdo, buscándola y ella había continuado con su vida desde el día en que se fue.

-tenemos un bebé Justin. Formamos una familia y soy inmensamente feliz- dijo -después de que nos vimos, al llegar y ver a mi bebé pude darme cuenta de que tome muchas decisiones malas en mi vida pero Shawn fue la mejor de todas. Como te dije, si me arrepiento por la forma en la que hice las cosas porque te lastime pero soy feliz, y ese día luego de pensarlo, me sentí bien al saber de que habías continuado con tu vida y que habías conocido a alguien a quien convertirías en tu esposa-

-yo creo que debería irme- ahora tenía muchas cosas en la cabeza, me sentía ahogado porque simplemente no me había imaginado nada de lo que me había dicho.

Caminaba hacia la puerta cuando su voz me detuvo -Justin- la mire -no lastimes a Selena de la misma manera en la que yo te lastime a ti. Si no la amas, sólo déjala ir-

-adiós Hailey-




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Perdón, perdón, perdón, perdón, perdón 💔 se que no subo hace un montón y no tengo excusas.
Espero que alguien lea esto, y si no, lo entiendo. Estuvo mucho tiempo desaparecida y lo lamento.



Maldito mentiroso [Jelena]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora