ERES MI ESCLAVO ~ FNAFHS~ Frededdy-

Recuerdos.

Mire a Freddy a los ojos, un brillo resaltaba en ellos, pero resaltó más la vergüenza de la situación entre nosotros dos. Me parecía bastante lindo tenerlo así de cerca.  Sentí un bulto contra mi pecho, lo cual me extraño, mire Freddy que sostenía algo contra su pecho y al parecer tenía una bolsa con algunas cosas dentro; la curiosidad fue bastante que no  tarde en preguntar que contenía.

- Pues, nada interesante, solo lo que comeré. -sonríe mientras miraba dentro de su bolsa- Te puedo dar un poco de lo que tengo, si quieres.

- Nono, claro que no me darás de tu almuerzo, es tuyo -respondo apenado. Claro que no le voy a quitar nada, después de todo casi no come. A parte se ve bastante pálido.

- Sabes que no me molesta. Ten, quieres mi pudin -sonríe extendiendo su mano con el pudin en ella. Me brillaron los ojos de tan solo decir "pudin".

- y-yo -iba a decir que no, por mas que lo quisiera, pero Freddy insistió así que no hubo discusión alguna y lo acepte. - G-gracias Freddy. - no pude evitar sonreír de una forma estúpida él tan solo ver el pudin. Enserio que me vuelves loco, niño.

Prov Escritora

Los chicos seguían charlando mientras se encaminaba hacia el patio trasero, para el castaño, era uno de esos momentos tan relajantes que casi no tenía -y por casi me refiero a bastante-. En ese momento; el castaño recordaba esos ratos tan tranquilos que pasaba con el rubio, para él eran tan especiales al igual que el rubio.

Se podría decir; que es el único que puede transmitir ese sentimiento, el único que lo hace sentir especial e importante. Alguien que no está con él por conveniencia.

(...)

Después de pasar un rato sentado en una de las bancas y charlando. Toco el timbre para comenzar las otras clases, se despidieron y cada quien tomo su respectivo camino.

(...)

- Oye Freddy -dice un rubio un poco nervioso-.

- ... -.

- Freddy?!...-

- ... -.

- Freddy!!! -grita el rubio el cual por fin logró robar la atención del castaño.

- P-perdón...¿Que sucede? -dice tranquilizandose por el susto que recibió, sacando la vista de su celular; el castaño se miraba algo pálido en el momento que miraba su móvil, lo cual empezó a preocupar al rubio.

- Por fin respondes, ¿Que mirabas en tu celular? -miraba al castaño seriamente esperando su respuesta.

- N-nada importante -responde bloqueado su celular, el cual  tenía de portada: Una mujer con delicados rasgos finos de admirar, labios cual carmín y piel algo bronceada. llevaba un vestido negro muy elegante.

La foto había sido tomada por su padre, en una de sus muchas citas que tuvieron él y su Madre. Esa es la única foto que pudo conservar de recuerdo, ya que a ella no le gustaba mucho que le tomaran fotos.

Cuando los síntomas de la enfermedad que ella tenía empezaron a empeorar, ambos, él y su padre. Insistieron en querer le tomar fotos para poder tener algo de ella, por lo menos para recordar cómo era y nunca olvidar esa sonrisa tan resplandeciente que ella esbozaba en su rostro.

Pero nadie sabía que esa iba hacer la última foto que tomarían, ya que al siguiente día empeoro; La sonrisa que siempre tenía, había perdido todo su brillo, los labios carmín habían perdido todo su color, ahora solo eran pálidos y secos. Su rostro era pálido y sus lindos ojos color avellana ocultaban bajo de ellos unas bolsas negras. se miraba terrible, y ella lo sabía.

No quería que la recordaran en ese aspecto tan terrible, así que sugirió que no siguieran tomando fotos.

Bueno, regresando a la actualidad, El castaño se encontraba mirando a la ventana muy inquieto.

Recordando la anterior respuesta del castaño, el rubio no se trago nada, él sabia perfectamente que algo estaba mal y él no quería decirle. Tomó un sorbo de su capuchino -el cual pidió hace unos minutos en la cafetería en la que se encontraban-  El chico solo se limitó a voltear a la ventana que se encontraba justo al lado de su mesa, pero al voltear se encontró con algo muy extraño que al parecer el castaño se percató de ello no hace unos minutos.

- Freddy...-dijo el rubio algo asustado, llamando la atención del mencionado-.

- ¿sí, Golden? -voltea para prestarle atención al rubio-.

- Tu tambien lo ves, ¿verdad? -dice sin desviar la mirada del vidrio templado de aque cafetería.

El castaño voltea a la misma dirección donde anteriormente miraba y ahora también lo acompañaba el rubio...

- Sí, lo veo -dice el castaño aterrado.

Los dos miraban hacia la misma dirección; asustados, nerviosos e incluso y extrañamente, curiosos; De saber quien es esa persona que los observaba del otro lado de la ventana, a una distancia alejada de ella.

Donde pocas personas pasaban por la misma banqueta de aquel extraño encapuchado, que los observaba con una expresión indescifrable -ya que esta en estaba llena de varios sentimientos incontrolables- esos ojos rojos penetrarian a cualquiera, y su melena color carbon lo hacían volverse más aterrador para aquellos dos.

Tan solo una calle y una ventana, los alejaba de aquel extraño. El castaño sentía que lo conocía de alguna parte, pero el miedo no lo dejaba pensar.

Prov Fred Anderson

- Perfecto, los tengo en la mira, y al parecer ellos también a mi -dice para luego mostrar una sonrisa algo espeluznante. - Freddy -suelta de su boca, teniendo pensamientos obscenos al ver aquel castaño, se miraba lindo al sonreír, pero verlo temblando de miedo, le excitaba más.

Cada expresión de él era encantadora, y muy pronto, solo y cada una de sus expresiones serán dirigidas a él.

- Lastima que aquel rubio estorba en mi camino -dice para luego consumir de aquel cigarrillo que tenía en su mano y luego soltar todo el humo por la boca.

El pelinegro sigue su rumbo entrando a un callejón oscuro.

- Bueno, ya me desare de aquel obstaculo -dice tirando aquel cigarro al suelo y pisarlo para si poder apagarlo.

Se fue alejando de aquel callejón dejando un cigarrillo aun con cenizas a fulgor.

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Hola ¿Me extrañaron?

Bueno, a mi historia, claro...

Me tarde mucho, lo se, y los siento; es que e estado algo ocupada con la escuela, en conclusión, los trabajos ;-;

Y lo más importante falta de inspiración, lo cual, casi me lleva a cancelar la historia, y sigue en pie, pero si veo que aun siguen lectores deseando leerla, entonces, probablemente la siga escribiendo.

En fin. Espero que os guste el cap y transmita todas esas emociones que quiero emitir a sus hermosos corazones.

Bye~