Death Or Storm (Jason Grace Y Tu)

Capítulo 46

En el anterior capítulo:
- ¡_____!- la persona bañada en naranja se acerca a grandes pasos.

-La Rue.-respondo intentando no reírme.

- ¿Dónde están?

- Donde están ¿Quién?

-LOS GEMELOS.- grita alterada.

- No lo sé pero si los veo les diré que los buscas.- le guiñó un ojo y sigo mi camino hacia la cabaña de Zeus.

En la actualidad:

Todo el camino hacia la cabaña me la pasó riendo, ya que, Clarisse después de mi respuesta ha gritado fuertemente y le gruñía a todo el mundo que se le acercaba inclusive a su novio.

Pobre Chris.

Al estar fuera de la cabaña frente a la puerta, tomó el pomo y lo empujó dándome pasó a la habitación.

Encima de la cama hay un gran bulto estirado, espatarrado, con un brazo puesto como almohada y el otro sobre su pecho.

Voy junto a Jason apartando un poco su pierna, para poderme echar junto a él.

Me sobresalto al sentir un brazo estirar de mí, hacercandome más a él.

Sonrió por inercia y con mi índice reproduzco el mismo patrón de seguimiento del borde del labio que el me hizo antes de besarnos el día del baile.

Me acercó poco a poco hasta que mis labios chocan con los suyos en un suave beso casto.

Al separarme un gruñido parecido al de animal sale del rubio a la vez que su brazo me intenta pegar a su cuerpo aún más si es que eso puede ser.

Sabiendo lo que está haciendo decido torturarlo un poco.

Me revuelvo para soltarme de su agarre, pero se nota que es más fuerte que yo.

Al ver que el plan a no se puede realizar ya que necesito salir de su agarre.

Pongo en marcha mi segundo plan.

Recorro con mi uña de forma lenta todo su cuerpo empezando por el cuello hasta bajar por los brazos y dedos, para seguido, subir desde el borde de su pantalón hasta el pecho, parando en ese lugar y escribir se que estás despierto.

Al momento veo como abre los ojos con una sonrisa preciosa.

-¿Cómo lo sabías?

-Eres fácil de descifrar.- le digo mientras mis manos se dirigen a acariciarle suavemente su cabello dorado.

-¿A sí?

Asiento con la cabeza al mismo tiempo que un uhum sale de mi garganta.

-Eres preciosa.- dice y me da un pequeño beso en la punta de la nariz.

Debería de estar acostumbrada, pero un color carmesí se no hace esperar, se extiende por mis mejillas y este aprovecha para burlarse de mí.

- Que te pasa _____ cariño, te has puesto como las fresas que cultiva Katie y sus hermanos/nas.

- Bobo.- le golpeó el pecho.

Su risa aparece, resonando por la habitación como si de una melodía se tratara.

Mi ahora, melodía favorita.

Para hacer más divertida la situación cojo una almohada y se la estampó en la cara y se la dejo ahí, al momento veo como se la quita y en su cara aparece una mirada pícara y los ojos entornados.