~Capítulo 3~

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De nada sirve enterrar el recuerdo si vuelves cada mes a llevarle flores.
-Irene X

=Lune=

Estoy buscando como loca el libro,pero no lo encuentro.
¿Enserio? ¿No tienen ese libro en esta enorme librería?, vaya deblyn.

-Je vais baiser,la poule de mon voisin fou a plus de chance. -digo susurrando.

-Disculpa. - escucho una voz detrás de mí y me tenso- ¿Necesitas ayuda?

-No,yo sólo estoy buscando un libro,pero parece que no...- me volteo y quedo sorprendida, decir que el chico está como quiere es poco, con su pelo negro y esos ojos azules pálidos, es muy alto,demasiado, a pesar de que yo soy alta,quedo como un pitufo a su lado,no es muy musculoso, sólo lo normal y eso me ....

-¿Hola? - salgo de mi ensoñación y lo observo, tiene una mueca divertida,seguramente tengo una cara de tonta, aún así lucho para no sonrojarme, sería mucho más vergonzoso si lo hago.

-Si,Hola yo... ¿Trabajas aquí?.

-Si y te veo muy desesperada por encontrar un libro, así que ¿puedo ayudarte?.

-Si,busco un libro llamado "Sobibor",escrito por Jean Molla.

-Bueno, realmente nunca había escuchado que alguien pidiera ese libro así que no sé si lo tenemos, si quieres puedes ir viendo otros libros mientras yo lo busco.

-Vale, gracias.

Lo veo entrar a una pequeña habitación que está al fondo de la librería, supongo que ahí guardan los libros que no son muy " populares".

Dejo salir un suspiro profundo, la esperanza comienza a disiparse.

Minutos más tarde, llega el chico y mis vista se dirige rápidamente a sus manos,están vacías, no...

-Lo siento,no tenemos ese libro. - dice con una sonrisa de disculpa.

Una tristeza golpea mi pecho dejándome sin palabras, siempre pasa lo mismo.
Una esperanza inunda mi pecho y por un momento estoy feliz y motivada, pero cuando me invade la realidad vuelvo a lo mismo.
Es como si se tratara del viento en tiempos de calor, por un momento se siente bien,pero cuando éste pasa,nuevamente te enfrentas a la realidad,a la triste realidad.

Dándole una sonrisa triste al chico,decido terminar con el momento incómodo que surgió gracias a mi silencio.

-No importa, de igual modo te agradezco por la ayuda,buscaré otro libro.

-¿No quiere qué te ayude?.

-No,gracias. Puedo hacerlo sola.

Y sin más, me doy la vuelta y comienzo a buscar otro libro.

El chico de la librería.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora