Cap. 13 Perdóname

40 3 0
                                    

Era ya de mañana cuando el sol empezó a clarear al día siguiente, Lizz se empieza a despertar de a poco abre sus ojos y ve a su alrededor y se da cuenta que nos es su habitación, quiere levantarse pero siente un par de brazos que la rodean al alzar los ojos vio a Yesung con el torso desnudo y abrazándola, habían dormido juntos esa noche, Lizz se sobresaltó un poco pero luego recordó lo que paso anoche.

Lizz: (pensando) ah ya me acordé que paso, pero ahora él sabe que soy Athea, debo actuar como si no se nada, no puedo arriesgarme a que sepa que todo fue una farsa.

Así que en silencio salió de la habitación de Yesung, no sin antes darle un beso en su cabello y acariciar su mejilla, fue a su habitación a ponerse su traje para trabajar y bajo a prepararle el desayuno a Yesung, al cabo de unos 15 minutos Yesung empezó a despertarse y al sentir el frio espacio a su lado se despertó de salto.

Así que en silencio salió de la habitación de Yesung, no sin antes darle un beso en su cabello y acariciar su mejilla, fue a su habitación a ponerse su traje para trabajar y bajo a prepararle el desayuno a Yesung, al cabo de unos 15 minutos Yesung...

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Así se veía el traje de Lizz para trabajar

Yesung: Lizz?.

Yesung se ducho y se vistió rápido y salió en busca de Lizz, primero fue a su habitación, luego a la sala, al comedor y por ultimo al jardín pero nada no estaba por ningún lado de repente escucha cantar a Lizz y busca de donde proviene la tonada hasta que llega a la cocina y se da cuenta que ella se encontraba allí preparando el desayuno.

Yesung: buenas, buenas, mañanas mañaneras dijo en tono alegre y juguetón.

Lizz: dulces mañana, dulces sorpresas, buenos días mi querido hyung, como has amanecido le contestó con una gran sonrisa de oreja a oreja.

Lizz: dulces mañana, dulces sorpresas, buenos días mi querido hyung, como has amanecido le contestó con una gran sonrisa de oreja a oreja

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Yesung feliz por encontrar a Lizz

Yesung: un poco adolorido del cuerpo y de la cabeza y tú.

Lizz: no me extraña, bebiste mucho anoche y casi a la medianoche empezaste con fiebres altas y escalofríos así que me quede toda la noche contigo y amanecí un poco desvelada porque no dejabas de moverte ya que delirabas mucho.

Yesung: deliraba mucho enserio.

Lizz: sí, pensabas que yo era tú madre así que decidí quedarme a tu lado hasta que mejoraras.

Esclava por amorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora