Luz de luna (Camren)

Capitulo 19

Pov Camila:

Llegue a mi casa con los ánimos hasta el suelo, tal vez Troy estaba en lo cierto y todo esto era algo premenstrual, suspire y abrí la puerta principal entrando a mi hogar 

-estoy en casa- anuncie, arrastrando los pies hasta el inicio de las escaleras

-lávate las manos y baja, la comida esta lista- me grito mi madre desde la cocina, supuse que estaba terminando de poner la mesa.

-de acuerdo- grite, arrastrando los pies por las escaleras hasta llegar a mi habitación, suspire dejando mi mochila en un rincón de mi armario y me cambie la blusa que llevaba por una sudadera ya que el día estaba un poco frió, con pereza baje de nuevo en dirección a la cocina y tome asiento mirando el plato frente a mi.

-que tal la escuela?- preguntó mi padre mientras cortaba un trozo de carne y se lo llevaba a la boca 

-bien- dije sin rodeos levantando los hombros y jugando un poco con mi puré de papas 

-creo que alguien ha tenido un mal día- atino mi madre mientras me servía un poco de jugo y dejaba un pequeño beso en lo alto de mi cabeza

-quieres hablar de eso?-preguntó mi padre, negué con la cabeza, se que mi padre se la pasaba prácticamente todo el día en el trabajo y momentos como estos, en donde podía tener una conversación con él era algo que tenía que aprovechar.  Pero aun así, este día no tenía ánimos para nada, ni siquiera para relatarle mi día a mi padre- bueno, no importa- mi padre dijo sabiendo que no hablaría- come ya o se enfriara- señalo a mi plato de comida y me regaló una pequeña sonrisa la cual respondí

comí en silencio, tardan dome mas de lo habitual en acabar todo lo que mi plato contenía, cuando por fin deje el plato vació me levanté de la mesa y fui al lavavajillas, mi madre me dijo que se encargaría de la limpieza, así que regrese a mi habitación y me puse los auriculares, le di Play a la primera canción y cerré los ojos dejando que la música me relajara. sin querer me había quedado dormida y solo me desperté cuando mi madre me avisó que saldría a un pequeño viaje con mi padre, me dijo que no podían llevarme pues tenía que ir a la escuela, pero prometieron regresar la tarde del día siguiente, claro que les suplique que me llevaran consigo pero solo se disculparon y se marcharon dejándome sola en casa, de nuevo sola, esto ya era algo a lo que estaba acostumbrada. Regrese a mi habitación, el tiempo se me había pasado volando así que fui directo a darme una ducha, al salir de la ducha mire mi reloj de pared eran las 8pm y aun no había cenado, suspiré, la verdad mi apetito no estaba en buenas condiciones ese día así que solo baje a la cocina y me prepare un sándwich acompañado por zumo de naranja, la casa se sentía sola sin mis padres ahí, pero eso no era nada nuevo, ellos muy rara vez se encontraban  en casa, suspire mirando a la nada mientras percibía el  silencio, el cual fue interrumpido por el timbre de la puerta principal.

-voy!- anuncie en voz alta y dando un suspiro camine hasta la puerta

-buenas noches señorita, estamos ofreciendo una promoción de chip Movistar que tal vez podría interesarle- bromeo Dinah con un falso acento norteño y yo solo revire los ojos 

-disculpe pero por el momento no estoy interesada- dije y cerré la puerta, escuche a Dinah quejarse del otro lado

-chancho no seas así, ya abre, traigo películas- decía del otro lado de la puerta

-mmmm... no lose- dije con falsa voz de indecisión

-también traigo pizza- abrí la puerta de forma rápida y miré a Dinah estallar en carcajadas- te mentí en realidad no traigo pizza 

-maldita- me hice la ofendida- ya pon tu enorme trasero dentro de mi humilde hogar

-oye- mi mejor amiga se quejo mientras entraba y cerraba la puerta detrás de ella- aquí la del enorme trasero eres tu- le di un manotazo a Dinah para que se callara y ella sonrió- porque tienes que arreglar todo a golpes?

-ya cállate y pon la película- le ordene a mi amiga mientras tomaba asiento en el sillón, creo que una buena dosis de Dinah me ayudaría con mi mal humor. 

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Pov Narrador:

un aullido resonó por el bosque-alpha, por aquí- el lobo color gris se detuvo y levantó la cabeza olfateando, los ojos verdes lo miraron detenidamente mientras este detectaba un rastro con los ojos cerrados, los ojos del enorme animal grisáceo se abrieron de repente y empezó a correr, toda la manada sabía lo que eso significaba, había encontrado el rastro. todos corrieron siguiendo al joven lobezno que se hacía llamar Dean, el más joven de la manada era un excelente rastreador, el mejor de todo el clan, las enormes bestias peludas corrían a prisa serpenteando entre los árboles, Dean se detuvo justo al límite del territorio de la manada de Lauren olfateando el suelo, no tardó ni un minuto para que los demás lobos llegaran hasta su posición, -ya no puedo percibir nada, lo lamento alpha- Dean agacho la cabeza en forma de disculpa hacia su alpha

-Lauren, no podemos hacer nada, al menos sabemos que han salido de nuestro territorio- decía el lobo de ojos azules y pelaje marrón 

-esos hijos de puta solo están jugando con nosotros- Lauren gruñó mostrando sus enormes y blancos colmillos, haciendo notar de esa forma lo disgustada que estaba 

-tranquila alpha, los encontraremos- la loba color blanco se acercó al enorme animal color  negro y frotó su cabeza con la quijada del lobo en forma de cariño, intentando apaciguar el enojo de su alpha, lo cual pareció funcionar pues Lauren respondió a la acción frotando en contra de su joven beta 

-tenemos que regresar- anuncio Lauren- es muy tarde ya y aun tenemos que ir al clan del norte para vender algo de lo que logramos cazar- los lobos asintieron y empezaron a dispersarse para regresar a la cabaña del bosque en donde estaba guardada la carne que recolectaban de las cacerías, se habían pasado todo el dia y parte de la noche rastreando, después de haber sentido la esencia de intrusos en sus tierras cuando estaban cazando, eran conscientes de que los intrusos eran los mismos que habían asesinado a Josh, habían reconocido su asqueroso olor.

Lauren gruñó de nuevo sintiéndose impotente, miro alrededor y algo llamó su atención, desde el punto en el que se encontraba podía mirar parte de la cerca que dividía la caza de Camila.

-Lauren nos vamos?- preguntó el lobo de ojos azules y su mano derecha Roberth, Lauren solo asintió y empezó a correr seguida de ambos betas, la delicada loba blanca Meliss y el robusto lobo marrón Roberth.

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A la tarde siguiente Camila se encontraba, como siempre, sola en casa. sus padres le habían dicho que su viaje se extendería un par de días más, una semana precisamente  , Camila le había hecho una rabieta a sus padres por teléfono cuando le dieron la noticia, pero ellos sólo respondieron que "eran cosas de trabajo" seguido de un "te amamos" y luego habían cortado la llamada dejando a una camila refunfuñona colgada detrás de la línea, la joven latina detestaba quedarse sola en casa, seguro no tardaría en morir de aburrimiento

-agggg, estoy arta!- grito contra la almohada- por que mis padres tiene que hacerme esto? acaso no me aman? no les importa pasar tiempo con su única hija?- la chica de ojos castaños dio un par de pataletas, removiendose de forma abrupta en el amplio sillón de la sala de estar

su reloj aún marcaba las 7 de la noche y ella ya estaba lista para irse a la cama, dejó escapar otro quejido, y escucho el timbre de la puerta sonando

la chica dejó escapar un sonido gutural antes de levantarse del sillón y caminar hasta la puerta tropezando con sus propios pies, se apollo en contra de la puerta y con voz desganada hablo- quién?- preguntó con voz afligida 

-emmmm, Camila? soy yo- escucho la voz detrás de la puerta y al instante la reconoció, quien no podría reconocer esa voz? pensó y abrió la puerta rápido encontrándose con Lauren del otro lado.