PERDIDA

Nagini se resiste

Narra Ron:

Estaba aclarando un "tema importante" con Hermione cuando vimos a Harry entrar en la Sala Común.
Vi que estaba agarrando algo del suelo, y cuando me di cuenta de lo que iba a pasar, intenté avisarlo.

- Harry, ¡espera!

Pero llegué demasiado tarde y Harry levantó la falda de la túnica color esmeralda de la profesora Mc Gonagall... En ese momento, la cara de Harry era un poema y de la colleja que le pegó la profesora, se desplomó, quedándose inconsciente.

Con ayuda de Hermione, llevé a Harry a la enfermería sin dejar de reírme a carcajadas por la situación. Y esta vez, ella no me lo reprochó.

Cuando lo dejamos en una de las camas, se le cayó algo del bolsillo. Miré de qué se trataba y vi que era... ¡El mapa del Merodeador!

Entonces... Si Harry había ido hasta la Sala común con el mapa del merodeador... Es que había visto algo allí.

Cuando ese pensamiento cruzó por mi mente, Hermione me miró alarmada.

- Ron, Harry habrá visto que no estábamos buscando a Nagini y que estábamos juntos... ¿Y si sospecha algo?

- No pasa nada Hermione, es nuestro amigo... Además, quizás no vino porque nos viera a nosotros, sinó que a lo mejor vio a Nagini en la Sala Común...

- Además de las bragas de la profesora Mc Gonagall- dijo Hermione riéndose.

- Harry estará bien con la señora Pomfrey, vamos a mirar en la Sala Común, a ver si descubrimos algo.

De camino a la guarida de los Gryffindor, tuvimos la mala suerte de  toparnos con Mc Gonagall, que nos frenó al instante.

- Weasley, Granger. Vengan conmigo al aula de Transformaciones.

Cabizbajos, le hicimos caso y la seguimos.

- Digánme. ¿Saben el motivo por el cual vuestro compañero ha realizado tal grosería?

- Creo que se pensaba que era una serpiente...

- Vaya Weasley, gracias por llamarme reptil, tal vez le gustaría comentárselo al director...

- ¡No! ¡Usted no me ha entendido bien! Me refería a que habrá pensado que su túnica era una serpiente...

- Weasley, aparte del basilisco de Hogwarts, que no creo que sea confundible con mi túnica, ¿cómo va a haber serpientes en la escuela?

Estaba claro que Mc Gonagall no me creía, así que le mostré triunfal el cartel que habíamos visto en el Gran
Comedor.

- ¡Dios mío! ¡Troll! ¡Hay un troll en las mazmorras!- dijo ella.- Uy, me he confundido con el guión de Quirell... ¡Serpiente! ¡Hay una serpiente venenosa suelta por el castillo!

Y se fue corriendo gritando a los cuatro vientos.

Aprovechando el momento, Hermione y yo retomamos nuestra misión donde la habíamos dejado y volvimos a la Sala Común.

-  Hermione, tu mira en el cuarto de las chicas. Yo miraré en el de los chicos. Si acabas, mira en la estancia principal de la sala.

- De acuerdo.

Estuvimos dos horas rebuscando por toda la sala: Debajo de las camas, mesas, sillas, sofás... Dentro de los baúles, entre los libros, en la chimenea... Pero no encontramos nada de nada. Solo algún que otro Knut por el suelo.

Algunos compañeros como Seamus y Neville nos ayudaron, pero toda ayuda fue en vano.

Harry llegó cuando estábamos a punto de irnos a dormir. Le pregunté cómo estaba y me dijo que cansado, que quería irse a la cama. Estaba sonrojado y no era capaz de mirarme a los ojos.

Cuando se fue, estuve un rato intentando que Hermione aprendiera a jugar al ajedrez mágico, pero estaba claro que ese juego no era para ella.

De repente, un grito de terror me sobresaltó y un escalofrío recorrió todo mi cuerpo.

Algo pasaba.