El tonto, tierno y raro Vampiro de al Lado (Borrador)

capítulo 27

-hombre de mi sueño, dejame hablar a mi primero -corto ariel mientras miraba al rubio impotente frente a ella.

El vampiro gruño entre molestó y fastidiado.

-deja de decirle, hombre de mis sueños

-pero es que lo es, es el hombre de mis sueños.

- himbri di mi suiñii -dijo cruzando sus brazos sobre su pecho marcando sus brazos sobre la fina camisa blanca el ahora no tan tierno vampiro- como si lo fuera -murmuró mirandolo de arriba a bajo.

-no me jodas y callate, chupa sangre -hablo el rubio claramente molestó.

-callate tú perro con olor ahhh -se quedo callado un rato hasta que volvio a hablar- perro.

El rubio giró los ojos molesto, ese vampiro si que era estupido.

1 hora y media antes.

-te ví como le devolviste la mirada -le reclamo un hombre grande de cabeza calva a una joven que parecía ser su novia.

-el me miro, amor -se excuso ella- yo solo lo fulmine con la mirada

-fulmine... fulmine -murmuró molestó- eso espero.

Eso y más escuchaba ariel, la cosa era que ese hombre que no hace falta decir que era más grande que brandon, pensaba que el vampiro miraba a su novia y que esta le devolvía la mirada cínicamente.

En lo primero se equivocaba, brandon a quien miraba era a ariel que estaba atras de la chica y en lo segundo eso si era verdad, esa chica había mirado de una manera tan vulgar a el castaño claro que ariel se sintio molesta.

Al llegar hasta donde la esperaba el vampiro, esté no se contuvo al preguntar del porque su cara molesta.

-por nada -respondio bruscamente y era que los celos la mataban.

¿que eran después del besó? ¿novios? ¿amigos con derecho? ¿compañeros de besos? ¡¿Que eran?!

No sabía, despues de aquel delicioso beso. No volvieron a hablar de aquello, con lo de julian interrumpiendo y ariel queriendo romperle el palo de escoba en la espalda no pudieron hablar de ese tema, apenas y tuvo tiempo el vampiro de invitarla a el parque de diversiones.

-que tal si vamos a la montaña rusa -no pregunto si no que hablaba mientras la arrastraba hacia aquel juego del demonio.

Ariel miro esa cosa asustada ¡¡no queria eso!! ¡¡joder!! pero ¿Qué le podía negar a el dulce vampiro que sonreía emocionado?

-si te has dado cuenta que de momentos parece como que quiere haber una gran tormenta para luego estar normal -murmuró mientras se acercaban más a la fila.

-raro ¿no?

-si.

...

-mamá -exclamó molesto julian al otro lado de la sala- hoy le contaré todo lo que descubrí, ariel debe saber esto.

-entinde, malditasea -dijo desesperada- si no se lo eh contado a nadie es por una razon, crees que me gusto separarme de mi hija -lo ultimo lo dijo con los ojos cristalizados.

-no me interesa el motivó, hoy mismo ariel sabra la verdad.

Resulta que cuando julian estaba comunicándose con los mejores amigos de la pelicastaña, había escuchado el llanto de su madre. Asustado corrió hacia ella pero se detuvo en la puerta, donde escuchó todo, absolutamente todo lo que su madre relataba entre llantos mientras miraba una foto vieja en su mano, sin saber que su hijo estaba ahí.