Me enamoré. Me enamore de ti de la única forma en que lo se hacer, de la única forma en que soy capaz de querer, me enamore de ti de una manera endemoniadamente enfermiza, desgarradora y perturbada, me enamore obsesionándome, pasando a llevar cualquier cuerda que me salvara de la locura, ignorando todas las señales de alto y seguí ilucionandome contigo como la primera vez; me enamore de ti a tal grado que te necesito como los humanos necesitamos él oxigeno, como él cielo necesita a su celeste, como un drogadicto necesita a sus drogas, como un corazón triste necesita la noche para poder llorar, como una luciérnaga va hacia la luz aún sabiendo que ese sera su final, me enamore extraviando la razón en alguna parte de mi atrofiada mente, olvidando que si tu no estuvieras él sol saldría de igual forma, pero yo, siendo necia y testaruda perdí esa noción de la realidad confundiéndola con una eterna fantasía, me enamoré creyendo que amar era la salvación de las almas perdidas, me enferme y luego comprendí que esas almas se perdieron buscando amor en unos ojos que ni siquiera les miraban a ellas, que se perdieron en las maravillas del amor cuando no eran más que dulces en los sueños. Comprendí que esas almas amaron de la misma forma en que lo hice yo, obsesionandome e ignorando toda señal de peligro.
-Una tierna suicida-
