Desconocidos

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Mauro camina a mí lado en silencio mientras yo miro a mí alrededor. Hace frío, pero me sienta bien,nos sienta bien .
Tras llorar con Mauro nuestra terrible mala suerte , tuvo la idea de salir y desconectar, al fin y al cabo aún no ha pasado la semana que me dio como plazo, eso sí, parece que estoy en un remolino en el que el tiempo apenas pasa .
-¿No es curioso ?- la voz de Mauro me pilla de guardia baja y tengo que hacer un esfuerzo por recordar con quién estoy .
-¿El qué? - mi voz está algo ronca de llorar, odio llorar.
- Nunca hemos hablado y de repente estamos dando un paseo en silencio para olvidar.- da un suspiro - lo que es la vida - acaba con una sonrisa triste en la cara y a mí se me encoge el corazón.

- Mauro... Te juro que siento mucho todo esto es... Yo....
-shhh- me calla Mauro poniéndome la mano en el hombro , veo una chispa de luz en sus tristes ojos - No tenemos la culpa de los problemas de  nuestros padres .
<< O lo que queda de ellos>>
- Quiero que sepas que no pude dormir cuando vi el vídeo - ahora me mira con cuidado y vergüenza . Sus ojos verdes muestran debilidad y nuevamente quiero abrazarlo . - No sabía a quien decirle eso . La única persona en la que se me ocurrió confiar fue en tí.

Me encojo abrumada por sus palabras y siento como una sensación rara se apodera de mi ser... Es confianza y el hecho de que haya confiado en mí. ¿ Se puede confiar en un desconocido?

- Mauro, quiero... ¿Podemos hacer una cosa?
-Emmm ... ¿ El qué?
- no quiero hablar de nuestros ... Padres . Háblame de que era de tu antiguo tú, antes del vídeo .

Entonces me mira y sus hombros se elevan un poco , me sonríe y se dispone a hablar.

Casi olvido que mi padre mató al tuyo.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora