Mi Corazón Entre Páginas...

Pesadilla

—¡Demonios! —exclamó mientras cerraba la puerta de su habitación y tras la puerta lloraba. —Esta vez no, por favor—decía entre sollozos y golpeaba su cabeza una y otra vez.

Todo era como un sueño, aunque él lo veía más como una pesadilla. No era fácil lo que estaba atravesando, pero algo dentro de sí mismo le susurraba: "Resiste un poco más, resiste..."

Había pasado por mucho antes, muchísimo se podría decir, pero esto había logrado hacer lo que nunca nada ni nadie había hecho antes; romper su corazón.

No era la primera vez que lloraba, pero nunca lo había hecho por amor... Y duele, dolía verlo en esa situación, y es que él sabía que todo tenía reparación o arreglo, pero dime tú ¿Quien repara un corazón roto? Que ironía pensar que quien podía sanarlo o quien podría hacer que se sintiera mejor no estaba y había provocado que su pesadilla empezara.

No era lo mismo que antes y es que cuando se ama no se olvida tan rápido, no te acostumbras tan rápido, no dejas de recordar aquellos buenos e incluso malos momentos, tan rápido y eso pasaba con él. Sabía que superarla iba a ser difícil pero no sabía que ella no saldría de su cabeza ni por un momento, que no evitaría llorar al quererla de vuelta aunque ella lo haya dejado roto.

Y allí descubrió el significado de amar, descubrió que tiene como sinónimo aferrarse, sentir, llorar, reír, sufrir, pero todo a su debido tiempo.

Despertó asustado... Y sí, era un sueño.

Y ahí estaba ella, dormida justo al lado suyo, habían peleado antes de dormir y él pensaba abrazarla como si la tuviera de vuelta, pero el orgullo y el pensar que su pesadilla podría hacerse real lo detuvo por un momento, mas adelante recordó el dolor que había sentido en aquel sueño y decidió abrazarla fuertemente y más que eso, se aferro a ella sin importar que pasaría mañana.

Porque sin importar lo que pase, el significado de amar siempre será: aferrarse, sentir, llorar, reír, sufrir... Pero todo a su debido tiempo.