Reencontrandos en invierno - AGUSLINA

Capitulo 18: Ven por mi.

Pov's Carolina.

Había salido llorando de la casa de John. Nunca esperé que pasara algo así. Entiendo que se molestara, pero no puede culparme ni juzgarme, el día que me tatué con Agustín él era mi pareja, estábamos enamorados y queríamos llevarnos en la piel para toda la vida, no quiero ni pensar en lo que pasaría si descubriera lo que ocurrió anoche.

Agus estacionó con un fuerte frenazo ya que venía a gran velocidad, ni siquiera alcanzó a apagar el motor cuando ya estaba frente a mi. Me tomó por los brazos inspeccionándome.

- ¿Qué pasó, qué te hizo?

- Nada....- no sabía como iba a decirle que la culpa de besarlo me había llevado a casi mantener relaciones sexuales con John.- Él... vio mi tatuaje, quiero decir nuestro tatuaje y enfureció, salió y me dejó aquí, solo quiero irme a casa, no sabía a quién recurrir.

- Bien, tranquila.- dijo más calmado.- Vamos.

Posó su mano en mi espalda baja para guiarme hacia el auto, pero antes de abrirme la puerta John gritó mi nombre.

- No le hagas caso, sube al auto.- dijo Agus abriendo la puerta del copiloto.

- Agus...

- Solo sube ¿si? yo arreglaré esto.

- No hagas nada.

- Tranquila, solo sube.

Le hice caso porque lo conocía sabía como era Agustín y la violencia no era en absoluto su manera de resolver las cosas, solo quería que todos los problemas acabaran de una vez por todas y pasar mi embarazo en un buen ambiente. Todos estos conflictos no le estaban en absoluto haciendo bien a mi bebé.

Pov's Agustín.

Cerré la puerta del coche, para que John no pudiera llegar a ella, pero entonces se acerco a mi y me tomó del cuello de la campera.

- ¿Qué mierda haces aquí?- exclamó.

- Suéltame, John.- dije firme pero calmado, no quería alterar a Caro. Así que aparte sus manos de mi.- Hablemos esto como las personas grandes que estamos intentando ser.

- ¡Y una mierda! ¡Carolina, sal de ahí ahora!- gritó golpeando la puerta de mi coche donde ella estaba sentada, de inmediato se encogió en el asiento.

- Eh, basta. La estás asustando.- espeté dándole un empujón para que se aleje de ella.- Nunca vas a volver a hablarle así ¿me oíste? Acabas de lastimarla y ha tenido que llamarme para que viniera por ella, solo deja que las cosas se calmen, la llevaré a casa y ya.

- No dejaré que vallas con mi novia a ninguna parte. ¿Crees que soy imbécil? ¿Qué no sé que apenas tengas la oportunidad vas a lanzarte a por ella?

- Solo intento cuidarla. A ella y a mi hijo. Porque es mío, John y eso no puedes cambiarlo o evitarlo.- dije y sé que eso le enojo, pero era la verdad y era hora de que comenzara a asumirlo. Aunque Caro lo elija y no a mi, siempre estaremos unidos por ese bebé que viene en camino.- Voy a llevarla a casa y cuando las cosas se calmen podrás hablar con ella.

- No vas a decirme que hacer.

- Pues entonces pregúntale a ella.- dije señalando la puerta del coche.- Si te dice que quiere hablar ahora me iré sin más, porque intento siempre respetarla.

John me ignoró y se acercó a la puerta de mi auto, con más de la fuerza necesaria abrió de esta, pero en cuanto sus ojos se posaron en ella su semblante se relajo. Podía ver en la forma en que su cuerpo actuaba frente a ella que la quería, sus ojos y toda su corporalidad lo demostraban. Lo sabía porque era la misma forma en que yo la miraba, la diferencia es que, mi amor era profundo algo más allá de lo racional, lo suficientemente puro y desinteresado como para dejar que se quede con otro chico si eso la hace feliz.