El día había empezado complicado para Florencia. No tenía certeza de la hora exacta en la que finalmente logró dormirse... pero los primeros rayos de sol ya comenzaban a asomar desde el horizonte, así que probablemente no fué mucho antes de las seis de la mañana. Había puesto el despertador a las nueve, pero lo apagó y siguió durmiendo. Se despertó sobresaltada unas horas después, probablemente tomando conciencia de lo que había hecho...
-Las once y media...! Concha del pato
Saltó de la cama y fue a tomar una ducha. En un principio pretendió ser rápida... pero no pudo resistir quedarse un ratito más y sentir esa sensación que tanto le gustaba. Las finas gotas de agua chocando confuerza contra su espalda. El vapor inundando todo el lugar. Sin dudas era uno de los simples placeres de la vida que mas disfrutaba.
-Vir... Hola! - Dijo al atender la llamada de su hermana que llegó al instante de activar el celular.
-Por fin nena! Me tenias preocupada...
-Si perdón... es que apagué la alarma y me re dormí... ññññaaa... ahora estoy a las apuradas o se me va a hacer tarde.
-Bueno, pero vos tranquila. La convención es una excusa... acordate de eso...
-Cuantas veces me llamaste Virginia? Rompe cajeta... ñññaaa... perdón. - Consultó sorprendida Florencia al escuchar la cantidad de notificaciones que sonaban durante la llamada.
-Aguantaaa, todas esas no son mías... te habré llamado tres veces... bueno, cuatro... cinco, poneeeele... quería saber como estabas... - Se atajó su hermana...
-Jjjjmmmm... pero van como veinte...
-Yyyy... no se te ocurre quien puede haber sido?
-Eeemmm... si... ya se, dejalo ahí mejor...
-Le tendrías que decir donde estas... y que querés estar tranquila... Pero que sepa que estas bien, será lo que será pero se preocupa...
Florencia estaba por darle la razón muy a su pesar cuando la interrumpe el sonido de una llamada en espera...
-Vir, te tengo que cortar... me esta llamando ññññaaaa
-Ok un beso. Cuidate si..
No es que le hubiera mentido a su hermana, de verdad pensaba atender... pero al ver la hora en su pantalla se dió cuenta que le quedaba poco mas de una hora y media de tiempo para la apertura de actividades... sabia que el día iba a ser largo y quería comer algo antes de dirigirse al salón de usos múltiples, donde serían los discursos.
Por otra parte... la poca energía con la que contaba seguramente se desvanecería luego de cinco minutos de "hablar" con Daniel... Si, "hablar"... porque era obvio como iba a terminar todo... hace tiempo que una simple charla era soñar demasiado.
Tomó sus cosas y se dirigió al restauran deseando que no estuviera demasiado concurrido. Sin embargo... descubrió que todos habían tenido su misma idea. El lugar estaba completamente lleno... todas las mesas ocupadas. Incluso la barra estaba colapsada.
Florencia había perdido las esperanzas de una comida decente, pero de repente un lugar se desocupó. Era una banqueta de la barra... Ella no acostumbraba sentarse en esos puestos, mucho menos para comer... pero disidió aprovechar la oportunidad y se sentó.
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En la cocina todo podría parecer un caos para el ojo forastero, pero en verdad era una sinfonía completamente estudiada y aceitada. Una locura de platos y preparaciones, eso si... pero cada uno conocía sus tareas y obligaciones a la perfección. Y cada movimiento que realizaban ambos chef y sus ayudantes se coordinaban y amoldaban entre si.
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Más que la luna...
Fanfiction"Vos... crees en las casualidades?" Y si Jazmín nunca hubiera aceptado el trabajo de ayudante de cocina?... si se hubiese ido al exterior, a trabajar en la importante cadena hotelera que hacia tiempo andaba detrás suyo...? Aún así el destino no se d...