Capitulo 22:

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-Calum, ¿enserio no me tienes asco? –pregunto con la voz entrecortada. El sintió como se le encogía el corazón. 

-No- dijo el casi gritando- Escúchame bien Tracy – coloco sus manos en ambas mejillas de ella y la miro a los ojos- Eres la persona más valiente que he conocido –ella soltó algunas lágrimas- y te agradezco por lo que has hecho, esto debió de ser difícil para ti –ella asintió.

-Yo…-ahogo un llanto- el Doctor White me dijo lo mismo que a ti supongo y decidí ponerlo en práctica –trato de sonreír, pero le salió una mueca. Calum le acaricio la mejilla. Ante aquel dulce tacto ella solo cerró sus ojos.

-Mmm… ahora entiendo –susurro él- por eso dijo aquello el otro día –ella asintió- ¿No te molesta que te trate como una muñeca hinchable? –pregunto el burlón. Ella abrió los ojos y rio. El sonrió. Le gustaba ver de nuevo a aquella Tracy. 

-Supongo que yo te estoy tratando como a un consolador –el rio. Tenía razón- al menos no ha sido tan difícil –suspiro ella.

-¿Lo recordabas? –quiso saber él. Necesitaba saber si había pensado en aquel bastardo mientras él la tocaba. El se encargaría de hacerla olvidar, de borrar cualquier huella que existiera en su cuerpo, alma y corazón. ¿Pero qué demonios le pasaba? Estaba muy cursi, pensó. Pero era su amiga y tenía ese instinto protector. Odiaba aquel hombre y ni siquiera lo había visto. 

-Si –bajo la mirada- pero después lo olvide –lo miro- fue extraño- admitió- estar así contigo es extraño –el también lo sentía- y bueno, me sentí mal después porque pensé que tu te repugnarías de mi.

-No, no –dijo negando- eso nunca, deja de pensar en eso. ¿Me escuchaste? –ella asintió. El la abrazo. 

Claro que no le daba asco, al contrario. La admiraba por cómo había superado aquello, no del todo. Pero al menos lo intentaba. Intentaba olvidarlo, y ella le había demostrado en cada uno de aquellos días que vivieron bajo el mismo techo. Tracy siempre sonreía y reía por todo. Siempre lo animaba diciéndole que sus problemas apenas eran solo una pequeña piedra que debía de superar y seguir. Ella había pasado por mucho y aun seguía en pie, en cambio el se había dejado de estar. No, eso ya no pasaría con él. 

Sabía que había faltado a su promesa, no había cumplido con lo que le prometió a su hermana hacia años. Había faltado a su promesa aquella noche buena, aquella navidad. Y ahora lo había hecho de nuevo. Pero después de todo quizás aquella promesa había dejado de tener efecto, se dijo. Ya que ___ le había pedido reconstruir sus vidas. Empezar de nuevo. Y no había otra forma que estar con alguien más, por más que sea solo sexo, era una manera de comenzar de nuevo. Una nueva vida.

Mientras estaban solos ahí pensando abrazándose, pensando e imaginando cosas. Calum necesitaba saber algo, no entendía por qué lo quería. Pero lo necesitaba. Quizás era el no haber follado por bastante tiempo lo que lo afectaba, se dijo.

-Entonces, seguiremos con esto –pregunto él. 

-Si tú quieres –dijo ella y se abrazo más a él. Se la notaba cansada.

-Está bien, solo duerme. Estas muy cansada –ella asintió.

-Solo no me dejes esta noche sola Calum–pidió ella mientras cerraba los ojos.

-No lo haré –prometió él.

Mi dulce obsesión || c.h|| #Book2 ||Adaptada|| (Semi-Hot) Terminada.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora