Noté como sus manos me agarraban la cabeza, y sus caderas se movían -hacía delante, hacía atrás- insistentes, abrí la mano y me puse a "trabajar" con la boca, con las manos le agarré los testículos, y me puse a "jugar" con ellos.
Lo oía gemir, y eso hacía que yo me excitara más, y acelerara los movimientos con mi boca, presionaba con los labios cuando la sacaba, noté como me sujetaba la cabeza, y movía más las caderas, de repente me empezó a tirar del pelo...
-_____... -lo oí jadear- _____, amor, apártate...
Le apreté los "huevos" y se corrió en mi boca... alcé la vista poco a poco, me fije que se había quitado la camiseta, seguí subiendo y lo miré a los ojos, él me miraba desde arriba, sus ojos estaban oscuros, y me miraba con deseo... me levanté poco a poco lo besé en los labios, dándole a probar su sabor... gemí, cuando me metió la lengua, buscando la mía...
Me levantó y me sentó cobre la encimera de la cocina, el beso se rompió un momento cuando me quitó la camiseta, pero enseguida nos volvimos a besar, ardientemente...
¡¡me estaba volviendo loca!!
Abrí las piernas y él se colocó entre ella, noté su erección presionada contra mi, y como pude moví las cadera... él dejó de besarme, y me mordió el cuello después de lamerme el lóbulo de la oreja, siguió recorriéndome con la lengua hasta que llego a mis pechos, eché la cabeza hacía atrás, me lamió y mordió -levemente- un pezón, luego hizo lo mismo con el otro, y yo no pude evitar gemir.
Después de un ratito, dejó mis senos, y en línea recta me lamió el vientre, aguanté la respiración -sin querer- cuando supe lo que venía... ahora iba a saber cuan buena era su lengua, ahí abajo...
Solté el aire que había retenido en un jadeó cuando sentí la lengua de Harry contra mi centro -empapado- noté como con sus dedos me abría los labios vaginales, y pasaba la lengua arriba y abajo, una y otra vez, haciendo que yo me volviera loca, haciendo que me costara respirar decentemente... a veces dejaba de respirar sin darme cuenta... de pronto dejó de pasar simplemente la lengua y pegó la boca contra mi sexo... noté sus dientes sobre mi clítoris, y temblé...
Tuve el impulso de rodearle la cabeza con las piernas para pegarlo más a mi, para tener la certeza de que no podía separar esa boca milagrosa de mi, pero no quería asfixiarlo, así que me conformé con agarrarle la cabeza con las manos, él seguía "jugando" conmigo, haciendo que me volviera medio loca, y alzara la cadera pidiendo más, cuando su lengua se detenía arriba, en mi clítoris, y la lamía haciendo círculos.
Después la bajaba, e introducía un poco su lengua en mi, de pronto, la lengua fue sustituida por uno de sus dedos, que se convirtieron en dos, y luego tres, mientras me penetraba con los dedos, su lengua torturaba mi clítoris, al cabo de unos minutos, me corrí, me dejé llevar... él siguió lamiéndome, dándome más placer.
Ahí estaba yo, encima de la encimera de mi cocina, temblorosa y sudorosa, con la respiración entrecortada y mi mejor amigo entre las piernas... Él se levantó, rodeó la encimera, y se puso detrás mía, se agachó y simplemente me besó... suave y tiernamente... sus labios iban despacio, y yo me acoplé a su ritmo, disfrutando del beso, de su lengua, que se había abierto paso dentro de mi boca, la mía salió a su encuentro, y juntas danzaron un baile frenético...
De pronto me volvió a costar el respirar, y noté como se endurecían mis pezones, las manos de Harry, comenzaron a acariciármelos, pellizcándomelos con los dedos... me estaba "humedeciendo" de nuevo, el beso era cada vez más intenso...
-_____... jadeó él contra mi boca-
Rompí el beso, me senté en la encimera, y me puse frente a él haciendo un extraño movimiento, le rodeé la cintura con las piernas, y lo pegué a mí, con mis brazos le rodeé el cuello, él anduvo, y yo quedé en sus brazos, mi sexo estaba contra su vientre, y su miembro -ya duro- me estaba rozando... de repente tuve la necesidad de tenerlo dentro, de sentirlo... aflojé un poco mis brazos, y resbalé un poco, rápidamente, noté las manos de Harry en mi trasero sosteniéndome...
-Hazza... -gemí, sobre todo porque él me acarició mi sexo, rozándome con un dedo- necesito...
No tuve que decir nada más... él dirigió su miembro, hasta mi centro -con una mano- y me dejó deslizarme, penetrándome...
Ambos gemimos, y yo me dispuse a buscar su boca... quería besarlo... apreté mis muslos vaginales cuando noté su lengua entrando en mi boca, y él me mordió -suavemente- un labio mientras gemía...
Metió una de sus manos entre nosotros y alcanzó mi clítoris, comenzó a frotármelo mientras caminaba hacía algún lugar, de repente noté algo blando en la espalda, abrí los ojos, y me ví sobre el sofá...
-Así no... -me quejé, lo prefería a él debajo-
Él me hizo caso, no sé muy bien como lo hizo, pero él ahora estaba de espaldas contra el sofá, y yo encima de él, me incliné y lo besé castamente, me incorporé, y comencé a moverme, sosteniendo mi peso sobre mis rodillas...
Comencé a subir y a bajar, presionando mis músculos vaginales cuando subía, él me estaba acariciando los pechos, pero una mano dejó a uno de mis senos solos, y bajó a mi clítoris, acariciándolo, consiguió que me volviera loca, y que comenzara a moverme más deprisa, con más desesperación...
Me empecé a convulsionar, contrayendo las paredes de mi sexo, noté como él se ponía tenso dentro de mí, y de repente los dos gritamos de placer, alcanzando el orgasmo...
Caí encima suya como una muñeca de trapo... sin fuerzas, y jadeante, él me abrazó y eso me hizo sonreír, aunque esto no debería de haber pasado... pero ahora, mejor no pensar.