Volvamos a amarnos (JICHEOL)

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—Hoy es nuestro último día aquí —Habló SeungCheol, estaban los chicos reunidos al aire libre al rededor de Seokmin

—No tienen que irse conmigo, pueden quedarse un tiempo más

—Nos iremos los tres, ya lo hablamos —Jihoon miraba su teléfono, en todos estos días ni siquiera le había prestado atención

—Pero lo digo de verdad, estar aquí les ha hecho demasiado bien

—Creí que eras experto Seokmin —Jihoon le regaló una mirada cómplice a su novio

—No es el lugar, somos nosotros —SeungCheol estaba en su momento filosófico, a veces le daba aunque siempre la seriedad le duraba segundos —Seguiré amando a Jihoon aunque estemos en otro lugar

—Aún pienso que deben quedarse unos días más

—Queremos organizar algunas cosas Seokmin, después te explicaremos —SeungCheol no quería dar damasiada información todavía

Pasaron la tarde ordenando sus cosas, recorriendo el lugar por última vez y haciendo bonitos recuerdos. Jihoon pasó la tarde hablando con el Señor Choi, su manera de expresarse no era tensa ni asustada, estaban cómodamente hablando y riendo

—Parece que están hablando todo lo que no se dijeron en estos años —La señora Choi le ayudaba a los chicos con sus cosas

—Me gusta que se lleven bien —Dijo SeungCheol sonriendo —Jihoon está más tranquilo desde entonces

—¿Por qué no le dijiste a tu madre que se van a casar? —La señora golpeó la cabeza de SeungCheol con un mantel

—Ni siquiera lo sabía yo —Intervino Seokmin colocándose al lado de la mujer —Soy su terapeuta

—Lo ibamos a decir en un tiempo más, a los chicos también —Se justificó un poco asustado

—¿Y cuándo lo decidieron? —Seokmin comenzó a hacer cálculos en su mente —Señora ¿Sabe qué? Teníamos un trato con reglas y ellos las rompieron, tuvieron sexo y no me lo dijeron a mi

—Seokmin mi mamá no tiene que saber eso —SeungCheol estaba avergonzado y su madre riendo

—Tiene que saber todas las cochinadas que hacían

—SeungCheolie hijo, espero mi invitación al matrimonio y que hagas muy feliz a Jihoon —Sabía que su hijo amaba con todo su corazón a su pequeño pero no estaba de más recordárselo,entre ellos había una conexión especial —Prometeme que si tienen algún desacuerdo de opinión lo conversaran antes

—Lo prometo mamá —SeungCheol tenía una mirada sincera, su madre era la primera en enterarse de todo, era su poder de madre

—Prometeme que jamás lo engañaras

—Lo prometo con mi vida

—Prometeme que lo cuidarás pase lo que pase

—Lo cuidaré siempre

—Y por último prometeme que cuando vuelvas vendrás con Jihoon —Aquella promesa se la hacian todos los años, era la meta de SeungCheol volver la próxima vez aun tendiendo a su pequeño a su lado

—Lo prometo

—Se feliz SeungCheol, no es malo discutir siempre y cuando puedan resolver las cosas hablando como calma, no es malo tener ideas diferentes, eso los hace mas interesantes, no es malo querer un poco de espacio sólo, es bueno darse tiempo para si mismo y sentirte auto independiente pero también necesitense, busquense, extrañense y diganse cuánto se quieren

Los consejos de la Señora Choi siempre eran los mejores

Salieron a mitad de la tarde de aquella casa donde pasaron divertidas cosas en cinco días, Seokmim había hecho un estupendo trabajo y Jihoon con SeungCheol habían refortalecido su relación

Se fueron llenos de cariño y cosas positivas, sus aventuras, sus risas no las olvidarían. Caminaron rápidamente para que la noche no les cayera encima y no les dejara ver por dónde iban. En el bus SeungCheol por fin pudo sentarse al lado de Jihoon, mientras que Seokmim al fin pudo leer su libro en paz

—Seokmin ni siquiera llamó a su puberto novio —Murmuró SeungCheol desde el asiento de adelante

—Es porque es imaginario Cheol —Querían provocar su enojo

—No es imaginario ni puberto —Se defendió inclinadose hacia ellos —Hablamos por mensajes y estamos muy bien

—Busca en los mensajes Jihoon —Le susurró SeungCheol pero Seokmin si alcanzó a escuchar, se revisó sus bolsillos y efectivamente su teléfono no estaba allí, lo tenía Jihoon

—Encontré una foto —Dijo exaltado mostrándole a SeungCheol

—Devulvanme el teléfono —Suplicó Seokmin tratando de no despertar a su compañero de asiento a su lado

—¡Wow! No parece tan pequeño —El mayor hizo un completo escaneo de la imagen, incluso haciendo zoom al máximo porciento —Tú te ves mas joven Jihoonie

—Ah eso no es verdad —Jihoon bufo devolviendo el teléfono a su dueño cuando el auxiliar comenzó a hacerlos callar

Estuvieron en silencio por todo el largo viaje y aunque ninguno de los dos tenía sueño, no pronunciaron ninguna palabra y no era necesario tampoco, solamente iban tomados de la mano acariciándose y dándose miradas dulces, tenían su propio lenguaje

Solo quedaban algunos días para que el contrato terminara