Su corazón estaba sanando.

Ya no se sentía tan mal por él.

Se dio cuenta de que no era para él y viceversa.

No del todo.

Pero eso no era lo más importante en esos momentos

Las ganas de morir se apoderaban de ella.

Con cada día que pasaba.

Sus demonios la invadían.

El terror la consumía.

Y la muerte la llamaba.



T R A N C EDonde viven las historias. Descúbrelo ahora