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No era él... Se giro pero no era él. Este chico siguió corriendo alejándose del complejo departamental.

La decepción me lleno al mismo tiempo que me sentí estúpido... ¿como podría ser el Wonho? ¿como podría ser él? Este chico era casi de mi misma complexión y ni se podía comparar a él.

Calme un poco mi respiración y mire hacia el complejo, mi vista se nublo y mis lágrimas se mezclaron con las gotas de lluvia. Caí sobre mis rodillas y comencé a llorar sintiendo el gran vacío por la ausencia de Wonho, y a la vez, sintiendo como mi corazón era roto otra vez en millones de pedacitos.

Me sentía impotente, un perdedor y un completo estúpido pero no podía dejar de llorar. Pensé que lo podría tomar la situación como un adulto y calmarme dejando que las cosas pasen de apoco, pero no es así. Quiero llorar... Llorar como un nene que se lastimo la rodilla y va hacia los brazos de su madre en busca de consuelo, pero mi orgullo no me lo permite, así que llore como un niño solo a un lado en una calle donde no había nadie y donde la lluvia ayudaba a ocultar las lágrimas que caían.


Entonces confirme todo, estaba enamorado de Wonho, lo amaba a tal punto de destrozarme por completo y rearmarme con una ilusión solo para volverme a destrozar. Entonces llegue a la conclusión de que el amor de verdad apesta y enamorarse es igual a la muerte... Y que Wonho, fue la muerte mas hermosa que conocí y que no conocería a nadie mas, porque él de verdad dejo una gran huella en mí en todos los sentidos posibles.


-¿Hyungwonie?- se escucho a mis espaldas entre tantas gotas.

Me levante rápido algo asustado. Mala idea, todo giro y luego vi todo negro. Después de eso no recuerdo nada.


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-Esta bien, solo esta un poco anémico y su cuerpo denota falta de descanso por eso tarda un poco en despertar- una voz desconocida me despertó y trate de levantar los párpados pero pesaban mucho -lo dejaremos en observación hasta mañana y con suero-

-Si, gracias- esa era mi mama y su voz sonaba preocupada.


Abrí los ojos dolorosamente, vi al doctor marcharse y a mi madre de espaldas hacia mi haciendo una reverencia.

-¡Hyungwon! ¡hijo!- corrió hacia mi en cuanto se giro para verme -¡no sabes el susto que nos diste!- se tiro encima mio y comenzó a llorar -desde ayer en la mañana que no despiertas y estabamos tan asustados- contó entre sollozos -¡nunca mas vuelvas a hacernos esto!- se alejo para darme un golpecito en el hombro mientras seguía llorando y no pude evitar sonreír -eres un hijo malo sino fuera por Hoseok que te trajo a casa..- mi sonrisa desapareció.

-¿Que?- la interrumpí.

-¡Que sos un mal hijo!- repitió.

-No la otra parte, Wonho- negué con la cabeza y corregí -¿Hoseok me llevo a casa?- pregunte con miedo.

-Si, él te vio cuando te desmayaste y te trajo a casa, de verdad nos asustamos levantaste fiebre y no bajaba, él se quedo con nosotros cuidándote pero al ver que no despertabas nos asustamos mas y te trajimos rápido- contó rápido entre sus sollozos.

-¿Ah-ahora d-donde est-ta e-el?- de repente comencé a temblar y a tartamudear.

-Ahora en la agencia dijo que debía ir si o si pero que mas tarde estaría por aqui- contesto mas tranquila mientras que se limpiaba las lágrimas.


Wonho, él... había vuelto a aparecer.

El chico del bus (2won) [TERMINADA]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora