Mi Odioso Jefe (Bill Skarsgard y tu)

28.

En cuanto llegamos a nuestro piso cada quien corrió literalmente hacia su habitación, yo me adelante para abrirle la puerta al señor Skarsgard para que pudiera entrar, en cuanto los 2 estuvimos en la habitación el se dejo caer sobre la cama y yo me deje caer sobre el sofá, estuvimos relajándonos unos minutos hasta que el señor Skarsgard hablo.

-Señorita Black necesito que llame a la recepción y pida de cenar para los dos- yo solté un suspiro porque técnicamente ya no quería hacer nada pero lamentablemente estoy en horas de trabajo.

-¿Que se le antoja de cenar?- dije tratando de no sonar fastidiada.

-Un espagueti a la boloñesa y jugo de uva- yo solo asentí.

Me levante del sofá pare dirigirme hacia donde estaba el teléfono, lo tome y llame a la recepción, pasaron algunos segundos hasta que la varonil voz de Drew sonó del otro lado.

-Buenas noches recepción ¿en que le puedo servir?- dijo soltando una pequeña risita lo cual me hizo sonreír.

-Hola buenas noches Drew, quisiera pedir servicio a la habitación por favor- dije haciendo que me diera un golpe mental ya que el señor Skarsgard estaba oyendo.

-Claro que si hermosa _____, sus ordenes son deseos para mi- yo solté una pequeña risita.

-Me puedes traer por favor espagueti a la boloñesa, un jugo de uva, una hamburguesa con papas y una coca- mire al señor Skarsgard y este me miraba atentamente.

-Claro que si señorita ¿no desea postre?- yo solté un pequeño suspiro.

-¿Que me puede ofrecer?- dije en un susurro.

-Unos dulces besos de mis labios ¿le parece bien?- yo sonreí como estúpida.

-Me parece perfecto- dije en tono juguetón lo cual le hizo reír.

-Perfecto señorita, en veinte minutos le subo su orden y no se preocupe por decirme que habitación es, se perfectamente en que habitación se hospeda el gran Bill Skarsgard- lo ultimo lo dijo con voz de soldado provocando que soltara una carcajada.

-Muchas gracias joven- dije cuando note que el señor Skarsgard me miraba serio y sin mas colgué.

-¿Que le dijo señorita Black?- dijo ahora poniendo cara de psicópata.

-Que nos trae la comida en veinte minutos y ahora si me disculpa me voy a meter a bañar- prácticamente huí de el.

Corrí hacia mi cajón y rápidamente saque un conjunto de ropa interior de color blanco, fui hacia al armario y tome otra de las pijamas que me había dado Gema junto con unas sandalias negras y sin mas me metí al baño, me bañe en un tiempo récord ya que no quería hacer esperar a Drew y aparte tenia un plan, solo esperaba que el señor Skarsgard estuviera dormido cuando yo saliera si so lo que quería hacer se iría completamente a la basura.

Después de ponerme la pijama y peinarme me lave los dientes y me puse un poco de perfume, honestamente no me veía tan mal, salí del baño cuidadosamente y solté un suspiro de alivio al ver que el señor Skarsgard estaba completamente dormido, camine hacia la puerta tratando de no hacer ruido y en cuanto llegue la abrí con sumo cuidado, después de unos segundos salí y cerré la puerta de igual manera.

No paso mucho tiempo en cuanto vi a lo lejos que las puertas del ascensor se abrían dejando ver a Drew que venia hacia mi con una sonrisa, rápidamente se acerco y en cuanto estuvo cerca de mi dejo el carrito de la comida a un lado y se paro frente a mi.

-Hola _____- dijo con una sonrisa aun mas grande.

-Hola Drew- dije de igual manera que el.

-¿Se puede saber que haces afuera en pijama?- yo lo rodee con mis brazos.

-Esperando a que llegaras para poder adelantarme al postre- y sin mas lo bese.

Al principio lo bese un poco tímida ya que no sabia de que manera reaccionaria pero en cuanto puso sus manos en mi cintura lo bese con mas seguridad, después de unos segundos nos separamos por falta de aire pero aun me tenia agarrada de la cintura.

-Que postre mas delicioso- dije con una sonrisa juguetona.

-Si así va a ser siempre, vendré todas las noches gustoso a darte tu postre, aunque siento que el postre fue mas para mi ya que recibí el beso mas delicioso de mi vida- dijo para unos segundos después volverme a besar.

Estuvimos como dos minutos besándonos hasta que lo separe delicadamente de mi, el me miro con el ceño fruncido.

-¿Que sucede hermosa?- dijo mirándome ahora confundido.

-Tengo que entrar ya que si el señor Skarsgard se despierta y no me ve se pondrá furioso- dije y el asintió comprensivo.

-Tenemos que entrar porque recuerda que les traje su comida- cielos por todo esto ya hasta me había olvidado de la comida.

-Esta bien pero espérame unos segundos- el asintió.

Abrí la puerta cuidadosamente asomando solo mi cabeza y vi que el señor Skarsgard aun seguía durmiendo, abrí mas la puerta y le hice una seña a Drew indicándole que podía pasar, le dije donde podía dejar la comida y rápidamente el empezó a acomodar todo con ayuda mía.

-Yo podía hacerlo solo ¿sabes?- dijo con una sonrisa en cuanto terminamos de acomodar todo.

-Lo se, pero yo quería ayudarte y no iba a aceptar un no por respuesta- dije con una sonrisa coqueta.

-Bueno hermosa entonces ya que esta todo aquí me retiro- yo hice un puchero y el soltó una pequeña risita al notar que el señor Skarsgard estaba dormido.

-Gracias Drew- el asintió con una sonrisa.

-No hay nada que agradecer- solté un suspiro.

-¿Quieres que te firme la hoja?- dije acordándome que normalmente los otros idiotas nos daban una hoja para que firmáramos de recibido.

-No te preocupes por eso hermosa, oye te ¿alguna vez te han dicho que te vez hermosa en pijama?- sonreí ante su comentario.

-Gracias por ese lindo comentario y eso que no has visto las pijamas del servicio- dije bromeando logrando que el me mirara un poco confundido.

-¿Del servicio?- dijo con una sonrisa juguetona.

-Así les dice el señor Skarsgard a mis pijamas sexis- los dos soltamos una risita.