Mi Odioso Jefe (Bill Skarsgard y tu)

40.

Honestamente me sentía muy agradecida por el lindo gesto que había tenido conmigo, pero a la vez me sentía un poco molesta ya que no me gustaba que me compara regalos solo porque me había echo pasar un rato fatal.

-Bueno ahora que tiene buen material ¿me puede hacer mi dibujo?- dijo algo entusiasmado lo cual era raro en el.

-Claro que si señor, siéntese aquí por favor- dije señalando la banca.

El señor Skarsgard se sentó y así empece con mi trabajo, honestamente me gustaba mucho la experiencia que me había dejado mi madre, ella era muy buena en su trabajo, decía que yo también era buena aunque nunca lo creí hasta ahora.

Después de 45 minutos de regaños y pedirle al señor Skarsgard que no se moviera ya que se movía demasiado termine.

-Listo- dije con una sonrisa.

-¿Ya termino?- dijo el señor Skarsgard como aliviado.

-Si- dije mientras asentía con la cabeza.

-Quiero verlo- dijo algo emocionado y sin mas le entregue el cuaderno.

El lo miraba como si no pudiera creérselo ¿sera que no le gusto?, de repente cuando menos me lo espere el Señor Skarsgard arranco la hoja, yo lo mire asombrada.

-Es perfecto señorita Black, me quedare con el- dijo haciendo una pequeña mueca.

-¿Y que piensa hacer con el?- dije un poco mas tranquila ya que si le había gustado.

-En este mismo instante vamos a buscar una tienda de marcos para mi dibujo- honestamente por un segundo creí que el señor Skarsgard se estaba volviendo loco.

Yo solo asentí ya que no quería arruinar esto con una de mis preguntas bobas, fuimos a buscar lo que el señor Skarsgard quería hasta que lo encontramos, después de eso el señor Skarsgard me invito a comer, honestamente no me la pase tan mal como para estar en su compañía, después de un rato salimos del centro comercial para regresar al hotel ya que teníamos que arreglarnos, caminamos hacia donde estaba el auto y en cuanto subimos el señor Skarsgard empezó a manejar, esta vez el camino no fue tan silencioso ya que constantemente el señor Skarsgard me decía que mis dibujos eran muy buenos y que debía dedicarme a eso. 

Por un tiempo lo llegue a considerar pero cuando mi madre comenzó a darse cuenta de que yo tenia el mismo talento que ella comenzó a presionarme para que me dedicara a lo mismo así que en pocas palabras me revele e hice lo que yo quise. 

Llegamos al hotel y en cuanto el señor Skarsgard estaciono el auto bajamos para después entrar al hotel, en cuanto estuvimos en la puerta de nuestra habitación abrí para dejar pasar al señor Skarsgard y después entrar yo, cerré la puerta y voltee a ver al señor Skarsgard el cual me miraba de una manera que no supe descifrar.

-Muy bien señorita Black quiero que me enseñe lo que planea ponerse esta noche para la cena- dijo el señor Skarsgard acercándose a mi.

-Claro que si señor- dije mientras me dirigía hacia mi armario.

Empece a ver todos los trajes que tenia hasta que encontré uno que se veía elegante, lo saque junto con unos tacones de 10 centímetros color negro, se lo mostré al señor Skarsgard y este parecía convencido.

-Es perfecto Señorita Black, ahora quiero que vaya y se empiece a arreglar- dijo en tono serio.

-Claro que si señor- dije de igual manera.

Me dirigí a mi cajón de la ropa interior y saque un conjunto color negro, me dirigí al baño y empece a bañarme, después de 15 minutos salí de la ducha y rápidamente empece a vestirme, mi maquillaje era digno de una fiesta de noche, mi cabello lo deje suelto y con la tenaza me hice ondas en las puntas, debo admitir que este traje se entallaba perfectamente a mi cuerpo haciendo que mi figura resaltara, en cuanto estuve lista salí del baño, me dirigí a la mesa ya que el señor Skarsgard estaba sentado frente a esta.

-¿Así estoy bien señor Skarsgard?- dije para llamar su atención, el alzo la vista ya que estaba mirando su celular y en cuanto me vio sus ojos se abrieron como platos.

Este me miraba detenidamente de pies a cabeza, de repente su ceño se frunció ¿acaso no me había arreglado bien?.

-¿Todo en orden señor?- dije algo nerviosa ya que el no decía nada, solo me miraba.

-Señorita Black debo admitir que cuando vi el traje pensé que era perfecto pero al vérselo puesto me doy cuenta que le queda un poco apretado- dijo con total normalidad.

-¿Quiere que me lo cambie?- dije mientras rogaba internamente a Dios que me dijera que no ya que este traje me había gustado.

-¿Tiene algún traje que se vea formal?- me acerque a mi armario y empece a revisar pero solo tenia ropa casual.

-No señor, lo siento- el soltó un suspiro de frustración.

-Ya quédese así señorita pero de una vez le informo que no se podrá separar de mi bajo ninguna circunstancia a menos que yo se lo autorice ¿entendido?- me sentía feliz pero trate de no sonreír.

-Claro que si señor Skarsgard, no se preocupe- no sabia porque pero tenia un mal presentimiento sobre esta noche.

-Muy bien señorita Black, ahora me voy a bañar- dijo y sin mas desapareció de mi vista.

Yo empece a guardar todo en mi bolsa, me acerque a la mesa y tome el celular del señor Skarsgard y lo guarde, me senté en el sofá y trate de relajarme ya que me sentía muy nerviosa y no sabia porque, pasaron 15 minutos y escuche algo realmente extraño, el señor Skarsgard había dicho algo incomprensible, me quede mirando la puerta del baño y de repente salio el señor Skarsgard muy enojado.