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Kacchan's Birthday

20 de abril, año 2018...(ubicación Japón).

Estaba de brazos cruzados mientras veía pasar a la gente, yendo y viniendo sin más como si estar apresurados fuera lo más importante del mundo.
Sin poder evitarlo chasqueó la lengua, ¿Por qué era tan perfeccionista que llegaba a su encuentro media hora antes? ¡Ni que fuera tan importante!

La insistencia que recibió del menor le había sorprendido a tal punto de casi explotar su móvil al escuchar su voz del otro lado de la línea, sentía que había algo diferente en aquel nerd pero no quiso indagar más en el asunto, todo lo contrario quería saber el motivo de su llamado, después de un año sin verlo le causaba cierta curiosidad por saber que había sido de él.

Sus manos se revolvieron entre sus bolsillos, su espalda chocaba la pared de aquella tienda de dulces mientras que a regañadientes veía el reloj gigante en el parque del frente, las agujas se movían de forma lenta y torturosa para él, soltó un suspiro ante aquello.

¡Ese nerd merecía ser explotado entre sus manos cuando lo viera!.

-L-lo siento Kacchan, ¿te hice esperar mucho?.

Cerró sus ojos por unos instantes mientras de forma desinteresada se enderezaba hacia un lado para así quedar frente a aquel chiquillo molesto, omitió cada palabra que iba a salir de su boca al contemplar a su contrario.
Este mismo llevaba una playera de All Might, sus manos estaban sosteniendo una bolsa de cartón, color rojo intenso igual que sus propios ojos, llevaba también un pantalón de jeans color negro que se apretaba a su cuerpo.
Siguió subiendo la mirada para luego alzar una ceja, ¿Qué demonios con este nerd?.

Su cabello se veía sumamente extraño, estaba amarrado en una coleta pero se podía distinguir claramente esos mechones bajar hasta llegar casi a la cintura, trago en seco ante esos ojos esmeraldas que lo miraban como si ese cabello fuera lo más normal del mundo.
De repente su pecho empezaba a galopar con una fuerza y sin más que decir, en su mente estaba floreciendo nuevas imágenes que vinieron con flash.

《Su corazón había dado un vuelco, esa belleza personificada le dió una impresión muy extraña, pero no ¡mierda no! Se suponía que lo odia y ahí estaba siguiendo sus pasos en aquel bosque profundo, aquella noche en donde su cabello le estaba guiando.
Estaba mal ¡Era más que evidente aquello! Debía obedecer, no estaba ahí por cuenta propia pero tenía muchas deudas en su orgullo para marcharse.
Quería que se diera vuelta, "¡mirame!". Ese era el pensamiento de ese intento desesperado por aquellos ojos, esos brillantes ojos que atrapaban a los suyos como si fuera una red perfectamente tendida para que caiga en cualquier momento pero ya era absolutamente tarde.

-¡Mierda Deku! ¿Qué haces a estas horas en este lugar tan malditamente peligroso?.

Un pequeño respingo había dado el más bajo en su lugar, por un momento había creído que su Guardia Real lo habían descubierto escapando de su Palacio, pero al instante se alivio por haber escuchado la voz de aquel samurai a sus espaldas...
Iba a darse la vuelta pero de pronto, unas manos rodearon su vientre a través de aquella yukata negra, sus ojos se volvieron brillantes y al girar la cabeza, el fuego que transmitía esos ojos rojos carmesí viajó por cada parte de su delicado cuerpo.
¡Debían ser cuidadosos! ¡Estaban siendo un pocos transparentes en aquel asunto!...pero eran llamativos aquellos ojos de soberano jamás le iban, sino aquella humildad adornada de...