I found you [DaiSuga] Omegaverse [Haikyuu]

Better Will Some Day, Never Far Away

Daichi observa al omega que duerme plácidamente a su lado, ronronea gustoso al oler ese delicioso aroma a omega embarazado y enlazado.

Acercó su nariz a a la curvatura de su cuello, besa sobre la marca que hizo a su esposo, aquella marca que realizó en su noche de bodas, la que reforzó hace nueve años y que los une para toda la vida.

El omega se remueve entre las sábanas del nido, siente como la mano de su alfa acaricia con cuidado y mucho amor su abultadisimo vientre. Sus cachorras se mueven en su interior por el toque de su padre, pareciera que le quieren más a Daichi  que a él.

Vuelve a sentir otro beso en su nuca, siente a través del lazo lo feliz que se encuentra Daichi al sentir a sus cachorras. (Aún si el cree que son varones)

Ha guardado por meses el secreto de que ahora va a ser padre de dos cachorras. Cuando fue la visita al doctor Daichi dio por sentado que eran varones los que iban a tener, no lo culpaba después de todos sus otros cinco hijos habían sido varones.

Incluso el había creído que iban a tener a otros dos varones más, pero su parte omega le dijo lo errado que estaba. Habían sido bendecidos, iban a tener dos cachorras, las cachorras que siempre habían anhelado tener.

Por eso, decidió ocultar la verdad a Daichi, quería que fuera una total sorpresa.

Suelta un bostezo,no era fácil tener a dos personitas en su vientre, estas le quitaban toda su energía, le provocaban un dolor de caderas, y hacían que se le hincharan horriblemente los pies.

Para su fortuna tenía a Daichi a su lado, este siempre le consentía y mimaba en todos sus embarazos.

—Buenos días amor. —Saluda el omega en un tono adormilado.

—Lo siento, te desperté. Iré a preparar el desayuno mientras tu duermes otro poco.

Koushi niega ligeramente —Me toca a mi prepararlo

—Debes de descansar más, ya sabes lo que dijo el doctor.

—Aún así...

—Nada Koushi Sawamura. Te quedas a dormir y punto.

—Eres un exagerado

—Solo quiero que tu y los bebes estén bien.

—Solo iré a preparar el desayuno

—Pero puedo hacerlo yo.

Koushi suspira, sabe que no va a poder hacer nada para impedir que Daichi cambie de opinión. Siempre es lo mismo cuando está en cinta, siempre se vuelve más sobre protector y receloso.

—Dormiré solo un poco más y después te ayudo. —Ve como Daichi esta apunto de decir algo, pero antes de que replique se adelanta a decir —No vas a hacer que cambie de opinión, así que más te vale que no digas nada más si no te vas a quedar sin sexo por un mes

Daichi solo frunce el ceño, sabe que no va a poder cambiar la opinión del omega y tampoco quiere arriesgarse a que Koushi cumpla su palabra.

—Pero antes... Dame mi beso de buenos días

Daichi sonríe, siempre es divertido ver como Koushi cambia de humor repentinamente. Sin hacerse del rogar se acerca a su marido, le da un pequeño beso en los labios, luego otro y otro.

Con cuidado comienza a desnudar a su esposo, deja expuesto su vientre, Daichi lo besa y comienza a repartir más besos subiendo  hasta llegar a sus pezones. Koushi ahoga un gemido cuando Daichi comienza a jugar con estos, su lengua engulle y estrangula uno.
Daichi sonríe con satisfacción al sentir ese líquido dulce y tibio en su paladar.
Koushi ha empezado a producir leche materna.