Sus alas volvieron oscuras, su pecado le apartó de la luz celestial, el amor lo llevó a conocer su reveladora voluntad, caer fue su pago y un sacrificio su pacto. Por el destino, cometí mi más grande traición, por él, mi felonía celestial.
Los perso...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Todo fue un caos, su primer encuentro con Viktor, después de su visibilidad había sido un desastre, encontrarle en el baño y desnudo, no era para menos.
El ruso, no entendía los acontecimientos, pero perfectamente su lado compasivo fue removido, su benevolencia había sido tocada y sus entrañas fueron estremecidas.
Identificarlo no fue fácil, en el proceso de ayudar al nuevo humano a adaptarse a la vida fue arduo, pero no se lamentó en haberse dispuesto a hacerlo. Algo había despertado en él, su corazón se sentía ligero, y la sonrisa que hacía tiempo atrás estaba inexistente, ahora le daba un nuevo matiz a sus días.
El castaño, se había presentado con un nombre y apellido, y la confianza del ruso crecía a medida que interactuaban y convivían, el peliplateado, aun se preguntaba cómo era que ese desconocido había tomado su vida de esa manera, pero no estaba dispuesto a dejarlo ir, de eso estaba seguro.
Sus alas se habían vuelto negras y el tiempo se lo estaba recalcando, su inmortalidad sería su condena, y la carta aun no había sido entregada, pero todo era evidente, sus alas así lo delataban.
Se había desprendido de sus negras compañeras, su despedida fue bajo una tenue luz en el sótano de aquel departamento, entristecido por sus recuerdos las guardó dentro de una acuerada maleta. Tendría que deshacerse de ellas, pero temía perder su única conexión con su origen.
Unos ojos curiosos no preguntaron por la escena, se silenciaron ante lo irreconocible, y se mantuvieron aferrados al presente.
Su estadía permaneció inalterable, sus días se llenaron de color, ambos sumergieron sus corazones en nuevos sentimientos que embargaron sus seres, para Yuuri, era un pecado, amar, ese hombre era su más amada y hermosa condena.
Sus luchas fueron encaminadas junto a sus férreas voluntades, si, Yuuri, conoció su libre albedrío, su osadía por revelarse comenzaba a mostrarle todo aquello el cual desconocía y que ahora disfrutaba.
Su confesión no tardó, su corazón no dejaba de latir como loco ante la brillante luz que irradiaba la sonrisa del ruso y que torpemente había conquistado.
La vida les sonreía, se sentía completo, la soledad de su alma estaba siendo erradicada, la compañía del cálido humano, un ruso caprichoso y efervescente volvía impoluta su voluntad, el se estaba convirtiendo en su vida.
Su traición no era un grato sentir, pero se veía apabullada ante el avasallante y ardiente amor que el humano le profesaba. Si todo volviera a ser creado, se aseguraría de que todo ocurriera nuevamente. No había vuelta atrás.
SACRIFICIO.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
*
*
*
Holis!!!
Ya quedan pocos capítulos, y bueno como les va? XD, espero que les haya gustado, dejen sus votos y comentarios, se les quiere y manda muchos besitos!!!
