El origen de los ángeles proviene de un espíritu creador. Uno a que muchos veneran, uno a quien la humanidad deposita su fe, un ser supremo, excelso, llamado Dios, Padre y Señor.
Nuestra creación fue ascendida al sumo cuidado de la creación humana, velamos y vivimos por este fin, nuestra naturaleza intangible nos hace hacer lo imposible, viajar a distintas partes del mundo en solo un instante, no podemos palpar objetos, imposible siquiera atarnos a una vida.
Enamorarnos de un humano es una falta grave, el dictamen de esta es la felonía, su consecuencia el destierro, y por último la caída, donde somos enviados a vagar errantemente por desoladas tierras.
El infierno más desolador, una purga imposible de pagar, nuestra peor condena no es estar solos, perder a quien amamos y por el cual decidimos apartarnos de nuestra membrecía espiritual es la peor cadencia.
Mis pies estaban sobre el acantilado, mi amado, mi destino, miraba el ocaso, la luz desaparecía trayendo consigo una pesada y fría oscuridad que comenzaba a consumir sus fuerzas.
Yo solo podía ver, nuestro trato permanecía, sus ojos indicaban seguridad, la entrega se daría.
La maleta fue desatada y abierta, el espeso y negruzco plumaje era regado por el viento. Mis alas permanecían inertes, solo fueron tomadas y alzadas, era el momento.
Mi corazón sintió ser arrancado, mi origen debía ser pactado, mi inmortalidad debía ser entregada. Dolía desprenderme de tantos años de recuerdos, y aunque me costara, debía cumplir mi parte.
Colapsé, y pude ver que la mirada de mi amado iba a mi dirección, mis alas habían sido llevadas por el viento, hasta volverse nada, sus plumajes se transformaron en blancas y puras capas, que se esparcieron por los aires, cubriéndonos de luz ante la oscura noche.
El sacrificio había sido llevado a cabo, no había más que ofrendar, el cielo destelló, perdieron a un ángel más, las gotas de lluvia mojaron sus cuerpos y el ahora humano sonreía, mientras gruesas lágrimas caían sobre sus mejillas.
Su dolor era entendible, perdió una parte de su ser, pero su felicidad era más grande, los brazos de su salvación le rodeaban, regando besos por todo su rostro, su suplicio había llegado a su fin.
Su historial quedó como si jamás hubiera cometido falta, su entrega reivindicó sus pasos, estaba en blanco, todo a partir de ahora marcaría un nuevo comienzo, y ellos se encargarían de escribir su propia historia.
Su conexión destinada cumplió su papel, el plan fue perfecto, y una lejana sonrisa lo afirmaba.
ÉL NUNCA SE EQUIVOCABA.
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HOLISS!!!
La voluntad humana se ve limitada por los dictámenes de la sociedad, siguiendo un precepto que hasta el momento final de nuestras vidas jamás dará sentido alguno a nuestros días, amar y ser amado es una providencia obligatoria, pero decidimos como humanos que hacer con ella... tenemos voluntad, pero carecemos de ella cuando cohibimos nuestros deseos, Yuuri, lo experimentó, lo conoció, cada circunstancia le enseño que no estaba mal desobedecer ciertos lineamientos, luchó por su felicidad, pero le dio tiempo al tiempo para alcanzarlo, pues él, tarde o temprano revelará nuestras más ocultas y encerradas esperanzas...
Solo el tiempo nos mostrará la verdadera razón de nuestras luchas, maduraremos en el proceso, pero todo al final valdrá la pena, o mejor expresado, la vida...
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Preciosuras hemos llegado al final de está pequeña historia, :( estoy contrariada, feliz y triste, pero agradecida por mil, pues ustedes me han acompañado hasta aquí y ha sido hermoso para mi escribir esto, a veces ni me creo que pueda realmente llegar a esto, XD...
Pero el tiempo mostrará nuestros talentos ocultos, los pulirá y algún momento dirá... Oye no seas XXXXXXXX que te estoy dando ventaja, si no, lo muestro yo... XP que hermoso verdad? (^u^)
Se les quiere, no se olviden de dejar sus votos y comentarios.
BESITOS!!!
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Felonía Celestial
FanfictionSus alas volvieron oscuras, su pecado le apartó de la luz celestial, el amor lo llevó a conocer su reveladora voluntad, caer fue su pago y un sacrificio su pacto. Por el destino, cometí mi más grande traición, por él, mi felonía celestial. Los perso...