Después de haberse duchado Chen resolvió en dar una vuelta pues no le apetecía quedarse en casa, amargándose con los recuerdos de su hermano que parecían estar en cada rincón. Transitaba por las calles de la plaza con la cabeza gacha y sin un rumbo fijo hasta que escuchó una especie de siseo.
Al girarse hacia donde provenía el sonido vio a una mujer escondida en un callejón haciéndole señas para que se acerque y él lo hizo sin pensarlo demasiado. La esencia que emanaba de ella sumado a su harapiento aspecto le revelaron que se trataba de una bruja y el rubio se puso en guardia al creer que le habían tendido una emboscada. La mujer no se percató de ello e inspeccionó su bolso sacando un frasco cuyo contenido era un líquido viscoso amarillo pálido.
—hay tienes. Doscientos kilogramos de grasa de Troll, justo como lo prometí. Ahora ¿Donde están mis doblones de oro?—le pidió frotando sus manos ansiosa.
Chen se quedó mirando al frasco y luego a la bruja sin entender que sucedía para después soltar una sonora carcajada.
—¿De qué te ríes?—preguntó con tono ofendido—lo que tienes ahí es grasa de Troll de la mejor calidad. Jamás encontraras una igual en otro lado.
—señora, me parece que usted ha cometido un gran error—contestó Chen mostrándole el dorso de su mano, la cual estaba marcada por el tatuaje de un árbol encerrado en el interior de un hexágono.
—esa es la insignia del gremio de Exylion. ¡¿E-entonces usted es un m-mago?!—exclamó con voz temblorosa.
—exacto. La grasa de Troll es un artículo mágico ilegal y comprenderá que siendo un miembro de Exylion mi deber es llevarla a la fiscalía.
La bruja se quedó inmóvil unos segundos. Mira que venir a confundir a su cliente con otra persona, ¡y precisamente con un mago! Debía hacer algo pronto o de lo contrario terminaría en la prisión.
—usted ya debió notar que mis poderes sobrepasan a los suyos. Es mejor que no se arriesgue en un combate donde tiene las de perder.
—¡e-espere!—exclamó angustiada—hagamos un trato. Déjeme ir y le daré algo a cambio.
—no hago tratos con brujas y además no necesito nada.
—todo el mundo busca algo y supongo que usted también—comentó—¿Quiere ganar dinero?, ¿Prestigio?, ¿Más poder?
—se equivoca. Esa clase de cosas me tienen sin cuidado.
—¿Amor?—inquirió con tono sugerente y por primera vez desde que se reunieron la determinación del chico titubeó.
—pues ahí está—dedujo sonriendo—haré que esa persona le corresponda si me deja ir.
—las pociones de amor también son ilegales—respondió con firmeza—y de cualquier modo ella está desaparecida.
—yo podría encontrarla por usted.
—mis intentos de rastrearla han sido inútiles. ¿Por qué habría de creer que usted sí lo hará?
—los recursos de los magos son limitados porque sólo utilizan magia blanca. Sin embargo, la magia negra posee un mayor alcance—habló segura de sí misma—Créame, para una bruja como yo será muy sencillo. Mi nombre es Sunmi, por cierto—se presentó tendiendo una mano.El rubio estuvo a punto de ignorarla imaginando que se trataba de un saludo. Ellos apenas se conocían y la bruja le desagradaba así que no había razón para tratarla como si fueran cercanos. Entonces noto que en realidad le estaba dando una tarjeta la cuál sujetó acercándola a su rostro para leerla. Entretanto, con la ayuda de sus poderes, ella se elevó hasta el borde superior de una pared del cajellón.
—¡oiga!—le reclamó creyendo que intentaba huir pero la mujer permaneció de pie en su lugar.
—vaya a esa dirección a media noche y traiga un objeto de la persona que desea encontrar.
—no recuerdo haber aceptado su ayuda, señora—comentó con una mirada seria.
—pero tampoco te negaste, guapo—contestó guiñándole un ojo—tranquilo, yo la encontraré incluso si dejo este mundo—le aseguró Sunmi antes de escabullirse envuelta en una nube de humo.
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Bloqueada
FanfictionSINOPSIS Jieun es una florista insatisfecha con su estilo de vida carente de emoción pero un día todo eso cambia al conocer a Chen, un mago proveniente de otro mundo que asegura conocerla. +++ -Escucha, no sé por qué actúas así pero no tenemos tiem...