- Hola De Nuevo, Marinette...- ᵃᵈʳⁱⁿᵉᵗᵗᵉ

~ débuts~

Chat noir (Adrien)

Habíamos derrotado a Hawk Moth en unos de esos días lluviosos y oscuros, Ladybug y yo sin dudas salimos muy lastimados de aquella batalla...pero al fin no más akumas, demonios... Al fin las personas podían expresar con libertad su ira y tristeza sin la necesidad de temer a ser convertidas en criaturas oscuras...no fue una batalla fácil, al fin Paris libre de la maldad y el caos pero para Ladybug y para mi...sería el fin de los ¨superpoderes¨ y superheroes...no más Ladybug y Chat Noir. El maestro fu nos permitió quedarnos con los Miraculous solo si les dábamos el uso adecuado, eso me alegro ya que yo no quería perder a mi amigo Plagg y Ladybug tampoco quería dejar sus Miraculous.

Una noche nos reunimos en la torre Eiffel, se sentó en la orilla de la torre Eiffel y dejo colgar sus pies al vacío, al igual que ella me senté a su lado y la observe...observe cada facción de su cara...ella simplemente era...hermosa, rompí el relajante silencio de aquella noche que nos rodeaba- bueno My lady...¿qué será de nosotros? - me fije que ella dejo de mirar el cielo para mirarme a mi y le sonreí cálidamente- no lo se, chat... - me sonrió de la misma manera, note que ella bajaba la mirada algo triste.

- ¿estas bien, My lady?...te noto algo distraída- exclamé con una pizca de curiosidad en mi tono.

- bueno...te tengo que decir algo... - me miro con un deje de tristeza.

- puedes confiar en mi - tome su mano y la bese - chat...me iré..de Paris - mi corazón dejó de palpitar por unos instantes, la chica que me hacia sacar cientos de suspiros...¿me dejaría?

- ¿Q-qué?...

la mire y ella se lanzo a llorar en mis brazos, no hice más nada que abrazarla y acariciar aquellos cabellos azulados que le daban un toque de ternura y belleza - ¿A-adónde te..iras? - ella me miró de un manera que hacía que un fuego incrementara en mi pecho, una especie de dolor agudo de tanto ver aquellos ojos color zafiro que la hacían ver irresistible...pero que posiblemente no volvería a ver.

- me iré a Alemania...tengo una beca allá - me destrozó escuchar que iría lejos pero a la vez feliz por ella por ser aceptada en una universidad en Alemania más sentía curiosidad en qué lugar de Alemania, escuche sus aretes sonar y me levante del suelo con ella - por favor...si esta será nuestra última vez que nos veamos...déjame probar esos labios que tanto he deseado todo este tiempo - le acaricié la mejilla mirándola, ella me miró y pegó sus labios contra los míos, sus labios eran tan suaves como la mismísima seda.

Nos separamos por falta de aire y me miró una última vez...definitivamente esta chica era mi perdición...mi más grande anhelo, uno que ya no estaba a mi alcance.

- no me olvides, gatito -

Dios...lleve una mano a mi pecho haciéndola un puño...¿Cómo una persona puede provocar tanto dolor con algunas pocas palabras? Estaba solo... ¿qué haría si ella me dejaba?, decidí volver a casa para poder meditar pero el hecho de pensar en que no estaría más simplemente no me dejaba.

Entre por el gran ventanal y me lancé a mi cama como si fuera un saco de papas quitando mi transformación y sin darme cuenta ya estaba soltado algunas lagrimas.

¡Maldición!

¿Por qué todo lo malo me pasa a mi? bueno, se supone que soy un gato negro pero... ¿porque ella? tan solo tenía 17 años pero...nunca me imaginaría amar a otra persona con tal magnitud...me deje caer en los brazos de Morfeo y Plagg se recostó en mis cabellos.

- no lo haré...m'lady...

6 años después:

Adrien (chat noir)

pasaron los años y yo tenía 23

pasaron los años y no tenía noticias de Ladybug, nadie los recordaba...como si hubiera sido olvidada al igual que con Chat Noir...

pasaron los años y yo seguía esperándola...

Una noche salí con Plagg para despejar mi mente del trabajo por unos instantes, mi traje había dado un cambio drástico al pasar los años era más adulto y se podía notar mi cuerpo un poco más trabajado por el modelaje...Aún para mi padre...

Hace pocos años atrás, yo me había tomado la molestia de ayudar a mi padre con la empresa y hacer su trabajo mientras el viajaba a pasarelas y esas cosas. Un día al mirar la televisión coloque mi programa más recurrente como siempre en mis desayunos...las noticias y al escuchar ¨la diseñadora Marinette Dupaing-Cheng, regreso de New York esta tarde a su tierra natal Paris para unas pequeñas vacaciones, argumentó¨ me sorprendí...Tenía un buen de tiempo sin escuchar algo de mi mejor amiga. Si, iba casi siempre a la casa de los Dupaing-Cheng a comprar mis galletas favoritas pero se habían negado a darme información alguna de esa hermosa chica.

Una idea tentadora se me vino a la cabeza y si ella tenía su empresa y yo la mitad de la empresa ahora llamada Agreste's, si ella aceptaba podríamos ser socios, tomé mi celular y llamé a mi secretaria le comunique que consiguiera el número de la linda Marinette Dupaing-Cheng para tomar simplemente un cafesito....

¿Qué?...solo es un cafesito

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