Querido diario, como dije ayer, iba a secuestrar a Alfonso. Ha sido fácil, pero hubo un problema con la burundanga.
Como Alfonso es un drogata, no le hizo efecto el somnífero, pero cogí un palo y con él golpee en la cabeza (varias veces).
Ahora Alfonso está atado a la cruz de la iglesia abandonada a las afueras del pueblo. Voy a ver si se ha despertado. Me disfrazaré de payaso para que no me reconozca, además él tiene coulrofóbia (fóbia a los payasos o mimos). He estado un rato torturandole.
Primero le restregado una sardina por sus piernas peludas y por su cara, luego le he traido a Fluflu (mi gato), el cual le atrae mucho el pescado (sobre todo las sardinas).
Se me ha olvidado decir que a Alfonso también le dan muchísimo miedo lo gatos, bueno ya te imaginarás lo bien que se lo ha pasado.
Después le he alimentado de migas de pan como a las palomas.
Me lo he pasado tan bien que el tiempo se me ha pasado volando y se ha hecho de noche.
Me voy a casa a dormir, buenas noches Alfonso jajajaja (risa maligna, otra vez)Múriel➕
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Crónicas de Múriel
HumorSi te gusta reirte de las desgracias ajenas te invito a leer esta historia. Múriel, una joven beata que escribe en su diario las azañas (si se le puede llamar así) que vive con sus 4 amiguis. Todo va bien hasta que se cruza en su camino un muchacho...