Afterlife.

Capítulo 4.

Jon y yo nos acercamos a ver aquellos botes.

Cuando pensaba que ya todo se había solucionado y que volveríamos a la normalidad, de pronto detrás de nosotros oímos un grito desgarrador, tanto que nos puso los pelos de punta.

Nos giramos para ver de dónde provenía y cuando nos volvimos a dar la vuelta aquel maletín con los botes, ya no estaba.

- ¿Pero qué? ¿Dónde está el maletín?- Dijo Jon buscando por todas partes.

- ¿Cómo puede ser que tan solo con habernos girado, ese maldito maletín haya desaparecido así porque sí?- Estaba empezando a pensar que no estábamos solos, alguien más estaba con nosotros.

Noelia.

- Seguramente Marta estará tan lejos de mí que nunca podré encontrarla.-

Hablaba sola por la calle, incluso a mí misma me decía que la gente iba a creer que estaba loca pero luego pensaba: ¿Quién? No hay nadie, solo gente muerta en busca de carne.

Estaba anocheciendo, tenía que encontrar algún sitio donde pasar la noche, iba caminando cuando me encontré con un edificio parecido a un hospital o un colegio. Entré para ver si por casualidad allí había munición y algo cómodo para dormir.

Estaba dormida cuando unos disparos me sobresaltaron, también oí gritos y por un momento intuí que era la voz de mi prima pero, había alguien más con ella así que, me dispuse a buscarla.

Marta.

- ¡Vamos corre entra ahí!-

Tras haber buscado quién o qué nos había quitado el maletín, Jon y yo empezamos a buscar por todo el lugar dónde estaba y de repente de un pasillo, comenzaron a llegar miles de zombies que hicieron que nuestros cargadores de las pistolas se acabaran en poco tiempo.

- No hay manera de salir aquí, hay demasiadas cosas ahí fuera.- Jon estaba desesperado buscando una salida.

- Jon.- Se movía de un lado para otro muy nervioso.

- Jon, ¡JON!- Mi grito hizo que diera un pequeño saltito.- Tranquilízate, vamos a salir sí o sí de aquí.

- No hay ninguna posibilidad Marta, no.-

Mientras Jon seguía sin tranquilizarse, todo se quedó en completo silencio, solo se escuchaba a Jon hablar.

- Eh, sh, sh, he escuchado algo, creo que hay alguien aquí.-

- ¿Y los zombies?-

- Parece que se han ido, pero debemos darnos prisa o en poco tiempo volverán.-

Salimos de aquella habitación con sigilo y volvimos a escuchar aquella voz. Me resultaba bastante familiar, creo que era Noelia.