Girl Saves Evil-Bangtan Boys-(BTS)

Capítulo 34

La vida de una niña a la cual la curiosidad siempre la mataba. No importa su riesgo ella solo quería aventurar: como diferentes platos, lugares y objetos. Una niña a la cual le daban todo lo que ella quisiera, una niña llena de amor, respeto, unión, riquezas y aceptación. Cualquier chica, desde la más pequeña hasta la más grande le podía tener la envidia más mala del mundo. Hasta que su abuelo decidió unirse a sus aventuras.

Su juventud fue un sueño para ella. Fue a lugares que nunca pensó en llegar a pisar, probo nuevas comidas y experimento objetos valiosos y peligrosos. Las curiosidades de ambos siempre los unía más, eran casi padre e hija que abuelo y nieta. No faltaba ni un día que llegaran hacer una travesía, eran momentos de muchos sentimientos así que su abuelo de cumpleaños número dieciocho le decidió regalar una cámara.

Desde ese entonces se unieron más porque no fallaba ni un día que grabasen o fotografiaran algún suceso. Todos los días usaban la cámara para cualquier cosa, tanto el hecho que un día se prometió ella misma en ser la mejor fotógrafa del mundo y ser reconocida gracias a su abuelo ya padre en su corazón.

Un día su abuelo había planeado una pequeña aventura que su nieta había deseado mucho. El día había llegado y ella no sabía la sorpresa que le venía, pero una discusión de madre e hija ocurrió. Tanto que su madre misma la había votado de la casa. Ella no le importo lo más mínimo, solo quería hacer lo que más le gustaba, quería fotografiar momentos inolvidables.

Ya iban por el camino y el móvil de su abuelo había sonado. Las reacciones de él eran molestas haciendo que se preocupara por la situación. Al terminar la llamada le hizo una pregunta, esa pregunta que le hizo a su nieta causo una discusión grave, más grave que el de un juez y el culpable cayendo al final ambos por un precipicio

Al abrir sus ojos tomo la gran noticia del fallecimiento de su abuelo. La única persona que la entendía desde pequeña. La familia le hecho la maldición de esta tragedia, tanto que desde ese entonces no la trataban igual si no que la rechazaban, solamente por haber perdido el control al volante. El día del entierro fue la única que asistió, sus familiares no eran de esas creencias de ver a enterrar a un cuerpo ya sin vida. Ese día, bajo la gran lluvia prometió seguir su sueño no importara que, cerrándolo con tirar la flor de lirio color blanca que había sembrado su abuelo con tanto amor que hoy mismo había abierto. Y desde ese día había huido de todo, quería empezar desde cero, pero eso creo que ella se perdiera aún más.