Querido y muy estimado señor Lord Voldemort.
Me he estado preguntando ¿alguna vez le dedicaron alguna canción?
Obviamente la del cumpleaños no cuenta, pero ambos sabemos que esa no es apta para ninguno de los dos. Nuestra genialidad va más allá de esa csncioncilla molesta.
Siendo esa mi duda existencial más reciente (y teniendo en cuenta las muchas que no puedo responder) no he podido evitar quemar neuronas, mis preciosas neuronas para encontrar la música perfecta que describiría mi afecto hacia usted (siéntase honrado, no le he cantado a nadie en mi vida), y debo decir que me siento completamente impresionado con la conclusión a la que llegó mi cerebro.
En cualquier momento debería llegarle la siguiente carta que contiene tal obra de las musas, que creería fue hecha especialmente para usted.
Espero pueda disfrutarla tanto como yo y no se moleste en tratar des incinerarla, romperla o tratar de huir. Le he puesto unos hechizos bastante creativos de mi propia invención.
Estimadamente, HJP.
Voldemort esperaba cualquier cosa mientras caminaba de un lado a otro en su despacho. A estas alturas, cualquier cosa proveniente de Harry Potter era un completo caos y estaba seguro de que el maldito niño no tenia nada mas que hacer que hacer de su vida una miseria todos los días, pero esto era demasiado.
Segundo después de que terminara de leer la primera carta, llego la segunda.
Roja, atada con un moño negro y burlándose de sus desgracias. Tom deseo correr tan rápido como sus piernas le permitían o, de preferencia, huir del continente.
La carta se transformó en tanto la lechuza la soltó y se fue como alma que lleva el diablo. Tom deseo rogarle al ave que se lo llevara también.
- Ajam, probando uno dos... - la irritante voz de Harry Potter empezó a hablar en un tono ridículamente alto y Tom insonorizó la habitación. Moriría antes de compartir tal humillación. Esto iba a ser un desastre. - para el único y muy especial Tom Riddle... - y comenzó a cantar.
Rata inmunda
Animal rastrero
Escoria de la vida
Adefesio mal hecho.
Infrahumano
Espectro del infierno
Maldita sabandija
Cuánto daño me has hecho.
Alimaña
Culebra ponzoñosa
Deshecho de la vida
Te odio y te desprecio.
Rata de dos patas
Te estoy hablando a ti
Porque un bicho rastrero
Aún siendo el más maldito
Comparado contigo
Se queda muy chiquito.
Maldita sanguijuela
Maldita cucaracha
Que infectas donde picas
Que hieres y que matas.
Alimaña
Culebra ponzoñosa
Deshecho de la vida
Te odio y te desprecio
Rata de dos patas
Te estoy hablando a ti
Porque un bicho rastrero
Aún siendo el más maldito
Comparado contigo
Se queda muy chiquito
- Fin.
Por más irónico e hilarante que sonara, Voldemort había reído con cada estrofa y se sentía especialmente halagado.
