Don't Forget

¿Existirás?

Estamos en un parque es nuestro aniversario, llevamos saliendo siete años, los mejores siete años de mi vida, qué mejor manera de celebrarlo en el lugar que te conocí. Como siempre tu vas corriendo por ahi, jugando con Yeontan, nuestra mascota, tu sonrisa es hermosa, creo que la primera vez que te vi supe que serías la persona con la que pasaría el resto de mi vida.

Me miras con tu sonrisa cuadrada adornando tu rostro, corres a mis brazos y saltas a ellos, yo te recibo en un abrazo y beso tu cuello, te amo Kim Taehyung, te digo aún en tu cuello, ríes en brazos y te separas un poco de mi para besarme, te amo Jungkookie, dices mirándome a los ojos.  

Aquí mismo nos conocimos, tu ibas corriendo y chocaste contra mi, ya que no me viste, te tomé por la cintura, evitando que cayeras al suelo, nos miramos a los ojos. Creo que no me dejé pensar y te pedí el número de teléfono, incluso yo me sorprendí. Gracias a Dios sonreíste y cuando nos separamos, buscaste un lápiz dentro de tu mochila y anotaste tu número en mi mano, luego de eso  te fuiste corriendo, dejándome en asombro absoluto por la belleza de tu sonrisa.

Esa misma tarde te envié un mensaje, diciendo quien era y tu respondiste amablemente al instante, te pedí una cita, a lo que tu aceptaste esperando que no fuera un acosador o un psicópata, solo reí de tus ocurrencias. Aunque noté lo poco normal de nuestro encuentro. Seguimos saliendo una vez por semana y hablando todos los días, cada vez sentía que necesitaba pasar más tiempo contigo y a los 3 meses te pedí ser mi novio. Aceptaste.

Fue el día más feliz de mi vida, el segundo día más feliz fue cuando a los dos años de salir, nos mudamos juntos y el tercero, cuando llego Yeontannie a nuestro hogar.

Miro el reloj una vez que tu fuiste a buscar a Tannie, son las 17.49, voy a buscarte por donde te fuiste caminando, una vez te veo con él en brazos, te recuerdo que iremos a cenar para celebrar. Los tres nos dirigimos al auto para ir a dejar a nuestro bebé a casa y cambiarnos de ropa. Sé que no te gustan los lugares muy formales, por lo que vamos a tu restaurant favorito, con vista al mar.

Entramos y pedí una mesa un tanto apartada del resto, nos sentamos y pedimos la comida, además de una botella de vino. Comimos y platicamos de los tantos recuerdos que hemos hecho juntos, las primeras vacaciones juntos, la primera pelea que tuvimos, cuanto demoramos en comprar nuestra cama, ya que no nos podíamos poner de acuerdo, reímos recordando estas cosas. Cuando terminamos de comer, te levantaste para ir al servicio, te dije que esperaría por ti en la terraza.

Volviste y me abrazaste por la espalda, tomé tus manos y me giré para ver tu rostro. Era el momento indicado, Kim Taehyung, me has hecho el hombre más feliz del mundo estos siete años juntos, por lo mismo no puedo dejar de decirte que te amo, con cada rincón de mi ser, espero al menos hacerte la mitad de feliz de lo que lo soy yo, con eso me doy por pagado. Amo todo de ti y no puedo ser más sincero al decirte que quiero pasar el resto de mi vida a tu lado. ¿Quieres casarte conmigo? Digo mirando a tus ojos, los cuales se cristalizaron al escucharme. Abrí una caja que contenía un anillo de oro blanco con la fecha de nuestro aniversario grabado. Cuando lo viste, las lágrimas comenzaron a salir de tus ojos y asentiste, abrazándome al instante. Te separé un poco de mi para poner el anillo en tu dedo anular y besarte. Luego sequé tus lágrimas, que sabía que eran de felicidad, ya que sonreíste todo el tiempo. 

Volvimos a casa y Yeontan nos recibió saltando en nuestros pies, lo tomaste en brazos y le contaste que nos casaríamos, besé tu frente y le acaricié la cabeza a Tannie, caminé a nuestro dormitorio en donde esperaba tu otra sorpresa. Le dije a Seokjin, mi hermano, que te propondría matrimonio hoy y le pedí que durante nuestra cena, él decorara nuestra habitación con velas, aún no entendía por qué, pero a ti te gustan.

Abrí la puerta de la habitación y vi el resultado de su tarea, estaba adornada tal como en una película, con pétalos de rosas y velas, hizo más de lo que le pedí, tu llegaste atrás de mi y viste nuestro dormitorio, parece que te gustó porque dejaste al pequeño Tannie en el piso y me besaste, Gracias por todo esto amor. Entramos al dormitorio besándonos.

Tomé su nuca y sus caderas y lo atraje con delicadeza. Acaricié su espalda por debajo de la camisa, y su piel quemó la yema de mis dedos en cada roce, tal como la primera vez. Quité su  camisa y el abrió los botones de la mía. Sus manos bajaron por mi pecho hacia mi estómago y sentí sus dedos jugar con el borde de mi pantalón. Caminamos sin dejar de besarnos y una vez ambos en la cama, llevé mi mano libre hasta su entrepierna y sentí la presión de su miembro apretado contra el pantalón. Le abrí el botón y le bajé la cremallera, para deshacerme de la molesta prenda. Besé su cuello y su clavícula, y bajé dejando atrás tantos besos como mis labios podían dar.

Bajé su ropa interior y rodeé su miembro con mis labios. Lo escuché gemir y aquello me dio ánimos para seguir. Me quité los pantalones y empecé a masturbarme mientras sentía su erección en mi boca. Escuchaba sus gemidos cada vez más fuerte, yo cambiaba de ritmo, de rápido a lento sólo para molestarlo, pero sabía que le gustaba.

A lo lejos escuchaba una alarma sonar, un despertador, espera ¿Un despertador a esta hora? Me separé de Tae, para escuchar bien. Dos segundos pasaron y abrí los ojos. Me senté rápidamente en la cama, estaba nuevamente totalmente empapado en sudor, no puedo creerlo, llevo meses soñando lo mismo, ¿Quién rayos es él? Cada vez que despierto recuerdo su cara, pero nunca puedo recordar su nombre. Creo que me estoy volviendo loco, quién no lo haría después de soñar su vida entera de esa manera, terminar enamorado de un sueño. Suspiro pesado y me levanto para ir a la ducha, tengo que ir a la universidad de nuevo.

¿Existirás al menos extraño de sonrisa hermosa?