Hola, te odio.

Hoy es el día.

Llevo desde que ví esa notita rara, no hablo con nadie. No voy al instituto, ignoro todo lo que puedo a Aitor.

Me quiero morir. Uf.

-Mamá, me voy. Luego hablamos, te quiero. -Le dije.

No le había dicho te quiero a mi madre desde antes de todo eso, no hablaba con nadie.

-Y yo cariño, ¿Que donde vas? -Dijo con cara de preocupada.

-Tengo que ir a la biblioteca, voy a empezar a ir de nuevo a clase y habrá que ponerse a tiempo de saberlo todo. Los últimos exámenes son esta semana que viene y no se nada.- Le dije, intentando que no sospechara.

-Ten cuidado por la calle mi amor, te quiero! -Me dijo con una sonrisa.

Salgo pitando, y pienso y pienso sobre qué va a pasar en tan solo unos minutos. ¿y si me pasa algo a mi?

Estoy llegando y a estas horas no hay nadie. Estoy aterrorizada. Tuve qué decirle a mi madre qué la quería más.

Me siento en un banco esperando a alguien, pero pasan los minutos y no viene nadie. De repente, me llega un mensaje de un número desconocido.

*Conversación entre la persona y yo..*

Sabía que ibas a venir, tan ingenua como siempre.-Escribió él.

¿Quien eres y por qué me has robado mi carta?-Escribí yo, sin saber en dónde me había metido.

Soy alguien qué no imaginarías, tienes la última oportunidad de vivir. Si veo que sigues insistiendo en saber quién soy, qué ponía en la carta o si quiera, qué le pasó a Emilia. Debiste leer la carta nada más murió. Tienes 10 minutos para qué la policía deje de investigar en el caso, decir qué perdiste tú la carta y tirar tu teléfono móvil a la 'papelera que tienes a los 5 metros. Te tengo vigilada, no des ni un paso en falso.

Vale, vale. Pero una última pregunta. -Escribí eso lo mas asustada, pero no me importaba mi vida lo mínimo.

-Te concedo la pregunta por ser valiente, aunque a la cara estarías asustada y secuestrada.-Escribió él.

Nada más esta persona escribió eso decidí irme a mi casa, empecé andando poco a poco, para que no pensara que quería huir, pero es lo que quiero. Si Emilia está muerta por esa persona, puede que a mi también me quiera muerta.

-No des un paso más si no quieres acabar al lado de Emilia preguntando por qué fuiste una niña tan estúpida.Escribió él.

Me paro, y veo a un hombre entre los arbustos fijándose en mi. Me siento, asustada, sin saber qué es lo que quiere ese hombre de mi.

-Veo que te han enseñado bien, y veo qué me has visto. A no ser que quieras morir, haz lo que te he dicho. y deja la muerte de Emilia cerrando el caso.

Ese hombre que he visto me suena de algo, pero iba con una gorra y con gafas de sol. No quiere que yo sepa nada, ¿Pero se arriesga a que le vea?

-Deja de mirar de reojo y ya sabes, si me entero de que vuelves a meter las narices en este asunto, vas a serle fiel a Emilia por los restos. Vete.

Me voy, tiro el móvil a la basura como me ha dicho. Sigo andando y pienso en quién es. Me suena de algo joder, quién es?

Llego a casa y le digo a mi madre que he perdido el móvil, qué lo había dejado encima de la mesa de la biblioteca y al volver en su busca ya no estaba. Todo es mentira y nunca he mentido a mi madre.

Me dirijo a mi cuarto cuando de repente veo qué hay otra nota, pero esta vez encima de la cama.

'No te vas a librar de mi, es tú turno.'