heroin ↠ myg + shj

03 ↠ 친애하는 ... 전화?

Pese a los maleducados mensajes de 3038119 no tardé demasiado en volver a dormirme. Parecía que compartir cama con alguien me daba algo más de tranquilidad mental. Eso no significaba que quisiera quedarme en esa cama el resto de mi vida ni, seguramente, más horas de las debidas pero sí que era cómodo. Quizás tendría que empezar a dormir con Sunmi las noches que estuviésemos solas y algo me diese vueltas hasta interrumpir todas mis ganas de descansar. Abrí los ojos con calma mientras escuchaba algo de ruido fuera de la habitación. El sol se precipitó sin permiso y chocó contra mis ojos haciéndome caer con cuidado en el colchón de nuevo; para mi sorpresa, estaba sola. Ocupé todo el colchón al darme cuenta de ese pequeño detalle y no dudé en estirarme todo lo que pude y quise. Tenía el cuerpo algo dolorido por la noche anterior. Es decir, la anterior a la anterior. Esa en la que no había dormido entre poco y nada y todo por unos números de mierda. Hablando de números. Me giré y alcancé el móvil.

11:35.

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Suspiré antes de esconder el rostro en la almohada. ¿Por qué me preocupaba tanto? Era un chico normal. Bueno, no era normal, era completamente todo lo contrario a eso pero vamos a dejarlo como punto a parte. Era mono, eso sí, peor no era para nada mi tipo y por lo que me había dado a entender con los tonos de sus palabras en esos dos últimos días, no íbamos a llevarnos nada bien. Aunque ya nos llevábamos bien. Me llevé ambas manos a la cara y ahogué un grito con tal de no alarmar a nadie en aquel apartamento. El apartamento. Cuando me di cuenta tardé bastante poco en salir de la cama u buscar mi ropa entre toda la que estaba en el suelo. Omití las medias y les hice un doblez con tal de  tirarlas o a saber qué hacía con ellas. RM las había roto lo justo y necesario como para poder colarse entre ellas así que no creo que tuviesen mucho más futuro. Una pena. Estaba quitándome la camiseta del susodicho cuando la puerta se abrió y dio la bienvenida a un chico mucho más... brillante que el de la noche anterior. Con rapidez cogí mi sujetador y lo intenté abrochar a duras penas mas unas manos lo acabaron haciendo por mí.

- A ver... déjame ayudarte, que para algo fue trabajo mío anoche el quitártelo...

Sonreí sin poder evitarlo ante ese comentario y me retiré el pelo para que no le costase demasiado maniobrar. Una vez lo abrochó agarré el jersey y lo coloqué tal cual, sin preocuparme por la falda por fuera de este. Total, a esas horas tampoco iba a pasarme nada y no era un look muy descabellado.

- Muy buenos días, por cierto... ¿Te hemos despertado? Estaba hablando con mi compañero de piso... No le hace mucha gracia que traiga a gente sin avisar pero...

- Cómo que te da igual, ¿no? - Reí sin poder evitarlo antes de negarle.- Ya estaba despierta, sólo necesitaba el empujoncito para salir de la cama... es muy cómoda, por cierto.

- Lo sé... cuando tengo que salir para ir a la universidad es un khaos. - Rió y por un momento me pareció la risa más dulce que había escuchado. No tenía nada que ver con el chico que había conocido la noche anterior. Ambos eran caballerosos pero su manera... Eran el blanco y el negro. - ¿Quieres desayunar algo?

Aquella pregunta me pilló completamente desprevenida. Estaba tan acostumbrada a dejar las casas a primera hora o a que ellos las dejasen que algo así era completamente nuevo...

- Sí, por qué no.

No sé por qué lo hice. De verdad no sé por qué lo hice, pero lo hice, y allí estábamos, vistiéndonos en su habitación como si no hubiese pasado nada la noche anterior. Recogí mis cosas y busqué mis plataformas, dispuesta a sacarlas de la habitación cuando...