Martial Clone Spell Master

Gremio carmesí aquí sentencio

¡Golpe!

Una patada fue directa al estómago de Xin Hao y le hizo rodar varios metros hacia una pared, golpeando con fuerza en el proceso. El joven artista marcial rugió de dolor mientras su rostro empezaba a descomponerse, se había dado cuenta de que el proceso de invocación de Desbloqueo del alma no eran tan rápido como él recordaba en su primera vez usándolo.

"¡Basura, pon resistencia o esto no será divertido!"

¡Patada!

Otro lanzamiento rápido hizo rodar a Xin Hao otros metros más en la dirección contraria mandándolo a volar hacia un armario cercano y rompiendo la decoración en el proceso.

"¡Maldición...!" pensaba Xin Hao mientras trataba de usar Desbloqueo del alma. Lamentablemente, no era capaz de usarla. ¡Algo impedía su uso y estaba trayéndole directamente la muerte!

Xin Hao se alzó tambaleándose con algo de sangre en sus labios oculta bajo las ropas oscuras y tosió examinando la situación.

Él no podía recordar bien la batalla que el anterior Xin Hao tuvo así que no podía saber qué técnicas controlaba el clan Glacial y tampoco Tsu Lin.

El hombre, con una cara desfragmentada en placer por la violencia del momento, se acercó viciosamente a Xin Hao para seguir golpeándole. ¡Él tenía que hacer algo! Huir ya no era una opción, él definitivamente no podía permitir que aquél vicioso cobarde golpeara a Chie y no darle una lección.

Xin Hao sonrió soltando algunas palabras casuales.

"Haha... Es divertido que una basura como tú solo sepa golpear mujeres y gente más débil que ellos. ¿Será que no tiene forma de aumentar su cultivo y la única forma de sentirse superior es apalear hasta la muerte gente más débil?"

Tsu Lin puso un rostro de sorpresa. Parecía que Xin Hao tenía un punto ahí.

"¡¿Cómo se atreve una basura como tú a hablarme así?! ¡Basura hoy conocerás la tortura más dolorosa!"

En la cabeza de Xin Hao, el guardia espiritual inferior parecía haber desaparecido por fin del mundo terrenal así que probó nuevamente a usar Desbloqueo del Alma. En su interior, se alivió al ver que funcionaba.

Cuando Tsu Lin se acercaba con el rostro rojo de ira, un aura asesina cayó por los alrededores. Era tan fuerte que no podía únicamente notarse para las personas, sino que además varios de los objetos de la habitación lujosamente decorada empezaron a romperse producto de la presión.

Aquella presión causada por el aura asesina hizo que ambos se pusieran pálidos y que Tsu Lin se paralizara del miedo, ¡ahora era su momento!

"Tú... Tú basura, ¡tú tocaste a Chie! ¡Te atreviste a hacer un acto tan depravado! Hoy conocerás la muerte más absoluta."

Tsu Lin no reaccionó cuando su cuerpo, inmóvil por el miedo recibió el puño de poder que Xin Hao lanzó impactando en las costillas. Xin Hao graduó su fuerza lo máximo posible para que el golpe fuera capaz de penetrar en los huesos y destrozara sus órganos poco a poco.

En poco tiempo, Tsu Lin se retorcía de dolor viendo cómo la monstruosa aura asesina de Xin Hao había penetrado en sus huesos y empezaba a expandirse dentro del cuerpo de Tsu Lin, haciendo que primero sus órganos empezaran a sangrar y después los huesos comenzaran a romperse uno a uno de la forma más dolorosa posible.

Los ojos del despreciable hombre que intentó forzar a Chie ahora rogaban por un poco de aire mientras podía notar cómo sus pulmones eran llenados de sangre sin remedio. En el suelo, moviendo los brazos hacia todas las direcciones, sus ojos llorando sangre y su boca balbuceando palabras solo fueron suprimidos cuando la habilidad finalmente llegó a su corazón y murió.

Xin Hao se giró hacia el otro hombre que, antes pálido del miedo ahora aplaudía con fuerza.

"¡Ha sido una demostración de fuerza magnífica! Realmente interesante, muchacho. ¿Será que tienes un futuro brillante?"

Xin Hao preparó otro puñetazo y se dirigió al instante hacia el hombre desconocido que, sorprendentemente no solo detuvo el puñetazo con una mano sin esfuerzo, sino que además se colocó detrás de él e inmovilizó a Xin Hao poniéndole una mano en el cuello.

"Por favor muchacho, ¡no tienes porqué ser hostil hacia mí! Yo no tengo intención de batallar contigo, solo estoy interesado por esas extrañas habilidades. Puedo ver a través del cultivo de la gente y tu cultivo es débil, ¡el más débil siendo concretos! Aun así, has desbloqueado una fuerza temporal que solo los dioses podrían soñar. ¿Será que el muchacho oculta algo?"

Xin Hao soltó varias palabras de carácter ofensivo mientras el hombre reía ligeramente y le liberaba de su brazo.

"No tengo intención de luchar, ya lo dije con anterioridad. Si aún el muchacho tiene intención de crecer en esas habilidades, el clan carmesí absolutamente le dará la bienvenida. Lamentablemente yo solo soy un enviado del rango más bajo, ¡pero tengo fe en que el muchacho tomará la decisión más adecuada para el futuro!"

El hombre se dirigió hacia la ventana y antes de saltar dijo algo.

"El futuro de este imperio es incierto, ¿no siempre es mejor aliarse con el bando ganador, muchacho?"

Y una brisa de aire hizo que su cuerpo se volviera una extraña niebla negra y desapareciera sin más. Xin Hao, ahora malherido y débil miró el cuerpo Tsu Lin que expulsaba sangre por todos sus orificios y suspiró. A pesar de que había tomado su venganza, en su corazón la ira aún no se había apaciguado.

Tsu Lin invocó de nuevo al Guardia espiritual inferior que, por algún motivo, saludó a Xin Hao como si le conociera de siempre. El joven artista marcial no le dio mayor importancia y tosió débilmente sujetándose en él.

Los Guardias espirituales inferiores eran seres intangibles y no podían ser tocados pero, si ellos lo querían, su cuerpo podía volverse físico para poder llevar cargas pesadas. Así de triste era la existencia de aquellos guardias.

Xin Hao se apoyó en el brazo del guardia espiritual inferior y le ordenó que le ayudara a salir de allí. El guardia asintió y sujetó a Xin Hao del hombro mientras saltaban por la ventana y desaparecían ágiles como el viento.

Ese incidente fue categorizado como un horrible intento de asesinato con éxito y se asoció que su autor fue el mismo hombre que realizó la matanza en el clan Hao además de ser la persona que vendía píldoras en el mercado.

¡Xin Hao quería llorar! ¡Le habían hecho autor de todas las atrocidades que habían sucedido! Por el momento no pensó mucho en ello y trató de reposar los días siguientes.