el fantasma de la opera de slink mason (recomendada)

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merceline se encontraba de pie en un lugar simplemente triste, las calles estaban sucias y las casas en mal estado, el suelo no era pavimentado si no de tierra y piedra, unos cuantos postes de luz estaban ahí para cuando fuese de noche pero merceline recordaba la advertencia que la madre de robert le dio 

"ten mucho cuidado jovencita, ese lugar es terrible e inseguro en especial para una niña como tu, ya es lo bastante peligroso estar ahí de día, no esperes al anochecer"

las palabras eran sabias y merceline contemplaba el lugar, tendría que preguntar si alguien reconocía a clint, a pesar de todo el nunca dijo su apellido, armada solo con la chaqueta de clint se adentro en el lugar

"kalendón" así se llamaba ese pequeño lugar a las afueras de la ciudad, preguntaba persona por persona describiendo al chico pero nadie sabia algo y las demás personas ni se interesaban en hablar

-ah si si.... el pequeño clint... hijo de esa maldita mujer...- dijo una anciana quien se había topado con merceline -claro que se quien es pero... el se ha marchado a la ciudad hace muchos años jovencita... no creo que lo encuentres aquí-

-no señora es que debo darle una noticia importante a su madre comprenda....-
-oh no... la familia de ese joven es horrible... hija no creo que debas ir ahí...-
-por favor señora si usted sabe donde vive necesito de verdad que me lo diga... esto es algo que de verdad debo hacer....-

-oh pobre muchacha...- dijo la anciana meneando la cabeza- de acuerdo... ella vive en la ultima casa a dos cuadras... es amarilla y sin numero, con puerta verde... has entendido?-
-si- merceline estrecho la mano de aquella mujer- muchas gracias señora-

-no es nada jovencita... aunque te advierto, en algunas horas oscurecerá.... no te quedes mucho aquí, se nota que no eres de por estos rumbos...- merceline asintió y se despidió de la mujer, de verdad era tan mala la madre de clint?.

merceline estaba frente a la casa que la anciana le dijo, la pintura amarilla estaba muy deteriorada, incluso se caía a pedazos mientras que la puerta era de madera desgastada, merceline entro en la propiedad caminando lentamente a la puerta, parecía un lugar de terror, un perro atado a un árbol la recibió en ladridos, el lugar era un poco tenebroso... costaba cada vez mas trabajo creer que alguien podía vivir ahí, con un gran estrago merceline tocó a la puerta mientras sentía la sensación de que alguien le observaba cuando sin darse cuenta habia llegado hasta la puerta, trató de tocar el timbre pero este estaba roto, asi que tocó directamente a la 'puerta de madera

-hola?...- dijo con voz temerosa 
-lárguese- le respondió una voz femenina desde dentro, seca y ruda lo que se le hizo grosero a merceline, parte de ella quería marcharse pero necesitaba hacer esto
-necesito hablar con usted señora.... es algo importante...-
-he dicho que se largue!- merceline se asusto al escuchar el grito de la mujer y pero aun cuando vio algo moverse detrás de una desgastada barda de madera
-por favor señora comprenda... es sobre su hijo... clint-
-que?!- merceline escucho un ruido desde dentro, y unos pasos acercarse a la puerta.