Voltea a verme [Stweek•SP]

[Un problema o dos] Pt.1

Claramente no esperaba que Tweek se lanzara a sus brazos para tener el gran romance adolescente que soñaba arduamente cada noche, incluso si el rubio hubiese considerado salir con otra persona además de Craig estaba seguro de que no era ni de cerca el número uno en la lista, ¿pero podían culparlo?

Era un soñador dentro del más injusto mundo real que podría vivir.

Stan Marsh era un tonto soñador que esperaba el más grato milagro jamás conseguido desde el Arca de Noé donde logró ahogar a muchas personas, al menos hubiese nacido para el diluvio y lograr ahogarse con el resto de personas sin fe, era ciertamente una persona con nula fe en los milagros.

Hasta el día de hoy donde los que parecían problemas son más bien sus respuestas del cielo y la mano de Dios interfiriendo a su favor, eso o era el más jodido afortunado del mundo.

Cuando llego a lo que era la escuela escucho murmullos, uno por aquí, otro por allá, murmullos y más murmullos, algo que no era de sorprender con la cantidad de cosas que sucedían en el maldito pueblo, lo anormal era las miradas acusadoras de cada uno de los alumnos y en especial de las chicas, muy específicamente de las asiáticas, esas niñas eran un problema si te veían hacer algo que les disgustara y tal vez ese fue el primer problema que surgió ese día, puede que debió tomarlo como una señal divina de que las cosas no estaban tomando el rumbo normal y que algo iba a pasar.

Pero nuevamente, era Stan Marsh un soñador despierto a punto de tener muchos problemas.

Abrió por fin el casillero que le correspondía para obtener sus libros de las siguientes tres horas -Esto es una mierda total- No había logrado dormir adecuadamente, la cita fallida y el tonto intento de confesarse lo atormentaba más de lo que imaginaba, cerró con fuerza su casillero y al voltear todos en el pasillo lo miraban.

¿Cerré muy fuerte mi casillero?, pensó y tal vez pudo ser eso, pero esas miradas tan pesadas y llenas de lo que sentía como disgusto lo seguían a donde sea que iba.

-STAN MARSH- Alguien gritaba su nombre con una furia insufrible, todos en los pasillos se quedaron en silencio, ¿le hablaban a él?

-MALDITO HIJO DE PERRA!!- se escuchaba realmente enojado -SAL MALDITA ESCORIA- los gritos no cesaban en lo absoluto, por un momento pensó en huir hasta que toda la escuela lo apunto delatando su presencia al agresor enfurecido.

-¡¿Cómo te atreves?! Es MI NOVIO!- oh.

Oh.

Debió imaginarlo.

Era F*cker, con toda la cara delatando su estado de ánimo, ¿siempre fue tan malditamente feo? Tweek de verdad no tenía un gran gusto en el físico de las personas.

-Oh, Craig, ¿porqué tan alterado a estas horas de la mañana?- antes de siquiera obtener respuesta una avalancha de golpes lo llenó por partes importantes del estómago y rostro, había tenido problemas con Craig y ciertamente peleas como la de hace semanas, pero esta vez podía sentir como Craig Tucker lo estaba haciendo papilla pura.

Bueno, tal vez Tweek le contó todo y por eso estaba tan enojado, no había problema, su corazón dolía más que los golpes de ese idiota.

La sangre comenzó a fluir por su boca y un poco de su nariz, se sentía aturdido y el ardor de su estómago subía hasta hacer que los pulmones trabajaran con dificultad, ahora sentía más que el simple dolor de un corazón roto, las manos de Tucker estaban aferradas a su suéter café, ¿Porqué había parado?

Se escuchó un sollozo.

Gotas de sal caían a su rostro, una a una.

¿Estaba lloviendo en la escuela? Tal vez los golpes lo hicieron aún más estúpido.

Después de subir la mirada al rostro de su enemigo se dio cuenta de lo que sucedía, Craig Tucker estaba llorando, mostraba un rostro lleno de dolor, dolor que lo sorprendió ya que hasta hace unos momentos se veía más que enojado.

-¿Craig?... ¿Estás bien?- las manos de quien era dueño de un gorro azul y pompón amarillo se apretaron más en su mortal agarre a su chaqueta.

-De todas las personas... de todas las malditas personas tenías que enamorarte de mi persona favorita?- ahora entendía la masacre en su contra.

Craig sabía sobre su confesión, tal vez sabía más cosas de las que pensaba, pero porqué se veía tan devastado ?...

-Jamás en mi vida había tenido algo bueno, cuando Tweek llegó a mi vida todo tenía sentido y ahora por tu culpa todo eso se desvaneció- ¿De qué carajo hablaba?

-Craig... No te entiendo, no se de que me culpas, yo no- fue interrumpido antes de terminar su explicación.

-Tweek rompió conmigo, me dijo que ya no sentía lo mismo por mí y todo por tu culpa- la cara de Tucker se frunció y estaba asquerosa con todas esas lágrimas humedeciendo su rostro.

Una risa sobresalto sobre los murmullos de la gente que lo rodeaba.

Logró ver más allá del gorro de Craig.

Claro, tenía que ser el estúpido gordo de Cartman.

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HOLAAAAA
Actualización? En pleno 2022? Sí a todo.
Ya casi termina esta historia y vengo inspirada.
Tqm a todos los que tuvieron fe🙏🏼✨